José Antonio Blas, gerente de la París de Noia: «Siempre descansamos al menos un día al mes, aunque solo sea para lavar la ropa»

CARMEN FERREIRO / M. V.

YES

«Creo que lo máximo que hicimos sin parar fueron 47 días», dice Blas en el fin de semana más festivo del verano tras 43 años en la orquesta

15 ago 2025 . Actualizado a las 18:21 h.

No hay rincón de Galicia sin fiesta, ni fiesta sin orquesta. La París de Noia lleva presente en las verbenas gallegas desde hace 89 años, casi un siglo haciendo bailar, cantar y disfrutar a más de tres generaciones gallegas. José Antonio, su gerente, puede desde adivinar la próxima canción que causará furor entre los jóvenes a organizar todas las fechas de espectáculo del año.

—¿Qué hay detrás del espectáculo de la París de Noia?

—Somos 22 músicos entre cantantes y bailarines, la plantilla completa está en 35 personas. Trabajamos con un escenario de 32 metros de largo, cuatro tráilers, un autobús, montaje de iluminación y pantallas de última tecnología, es una infraestructura verdaderamente costosa.

 — ¿Ahora mismo, cuánto dura vuestra actuación?

—Unas tres horas. A partir de ahí a veces hacemos un primer pase de dos horas y un segundo de una hora. Y otras veces hacemos una cosa que ya se está haciendo en bastantes sitios, que es hacer un pase seguido de tres horas.

—¿Habéis tenido que decir ‘no' a muchas fiestas este año?

—Nosotros decimos que no a las fiestas cuando nos llaman y ya estamos ocupados. Los meses de verano tienen los días que tienen. Entonces, imagínate que a mí me llaman para el 10 de agosto. Si esa fecha ya está ocupada, pues no la puedo hacer. También a veces son cuestiones de distancia. Si tocamos hoy en Ourense y me llaman para ir tocar a Valencia al día siguiente, pues claro, no tenemos margen.

 — ¿Quedan días libres para descansar en verano?

—Siempre dejamos días libres. Por lo menos uno en el mes, aunque solo sea para lavar la ropa. En el mes de julio hubo dos o tres días que tuvimos libres. En agosto tenemos solo el 21, y en septiembre también hay tres o cuatro. Y tenemos días para descansar un poco, aunque lo que más hicimos sin parar creo que fueron 47 días.

 —Este fin de semana es el puente en el que más fiestas hay en Galicia, ¿vosotros cómo lo vais a gestionar?

—El día 15 estaremos en Sada y el 16 en Ordes. Es cierto que hay más fiestas en Galicia, pero para nosotros no dejan de ser unos días más de trabajo, lo único diferente es que podemos estar nosotros tocando en una fiesta en Sada, por ejemplo, y tener a cinco kilómetros otra orquesta tocando en otro sitio.

 —¿Cómo resisten los artistas, se requiere de mucho entreno previo?

—Todo requiere una formación, está claro. Pero cuando se llega a este nivel de actividad, los cantantes y los músicos, en realidad, ya llevan todo el invierno preparándose. Hay entreno, hay ensayo y hay preparación.

—¿Cuánto tiempo estáis ensayando para llegar a tope en verano?

—Nosotros empezamos los ensayos habitualmente en noviembre, y el espectáculo lo estrenamos a mediados de abril. Después alternamos los ensayos con las actuaciones que tenemos en invierno.

—¿En todos esos meses, hay algún cambio en el espectáculo?

Siempre aparece el típico tema, aunque ahora ya no existe el tema del verano, ahora hay 40.000 temas del verano. De repente, está esa canción que tienes que hacer porque lo está petando, y tienes que ir a la vanguardia y sobre la marcha para introducirla.

 —Antes coincidían más la París y la Panorama en el mismo sitio, tiene algo que ver con el caché?

—No, juntar a París de Noia y Panorama en una misma verbena es un poco complicado. Lo digo porque a mí me encantan los bolos con Panorama, pero si yo organizara la fiesta, sería listo y pondría cada día una.

—¿Os habéis planteado sacar una versión de la París de Noia «low cost»?

—No, no se me pasa por la cabeza. Bastante trabajo da mantener, cuidar y organizar una orquesta para tener una filial. Tengo la orquesta que tengo y lucho por mantenerla ahí arriba, entre los grandes.