Piden que la tasa turística se destine a mitigar la gentrificación del centro de Vigo
VIGO

La plataforma contra la masificación de visitantes advierte que las medidas fiscales solo no solucionarán el problema
02 sep 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La plataforma Fronte á Masificación Turística Vigo-O Morrazo, integrada por 18 organizaciones sociales, vecinales, ecologistas y sindicales, entregó ayer una carta abierta en el Concello de Vigo en la que celebra el reconocimiento municipal de los impactos de la masificación turística, pero advierte de que «unhas medidas meramente fiscais non solucionan o problema».
El colectivo pide que, como medida transitoria, los fondos recaudados con la futura tasa turística se destinen a paliar las consecuencias sociales y ambientales de este fenómeno.
La misiva, dirigida a los concejales de Turismo, María del Carmen Barreiros, y de Política Social, Yolanda Aguiar, así como al alcalde Abel Caballero, reclama la apertura de un periodo de consulta ciudadana sobre la implantación del tributo. El Concello ya había anunciado un proceso de diálogo con agentes sociales y sectores afectados, tras el que la plataforma exige medidas concretas y recuerda que el turismo genera más de dos millones de estancias anuales en Vigo.
El colectivo insiste en que la tasa, por sí sola, no solucionará la sobreexplotación turística, que se acentúa en fechas como la Navidad. «O recadado pola taxa debe destinarse a mitigar o aumento do prezo da vivenda e evitar a expulsión de familias veciñas do centro urbano ou dos barrios máis colonizados pola proliferación de vivendas de uso turístico», subrayan.
La plataforma confía en obtener una respuesta positiva y en que el Concello «escoite e atenda as propostas que se lle trasladen», de forma que el nuevo tributo se vincule a medidas efectivas contra el encarecimiento de la vivienda y los efectos de la turistificación.
Esta tasa es un impuesto que abonan las personas que pernoctan en alojamientos de la ciudad. Su implantación tiene como objetivo recaudar fondos para compensar los costes derivados de la presión turística sobre los servicios e infraestructuras municipales. El alcalde anunció este verano la necesidad de implantar esta tasa siguiendo el modelo que se aplican en otras ciudades de la comunidad.