«En la zona frecuentada por ese grupo de cigüeñas existen al menos diez apoyos eléctricos sin aislar, con mayor o menor riesgo para las aves», indica el naturalista Manu Sobrino
14 may 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Manu Sobrino, un popular naturalista guardés con una prolífica actividad divulgativa bajo el nombre de El Naturalista Cojo, ha lanzado una campaña ciudadana para exigir medidas urgentes que eviten la muerte de ejemplares en una zona donde la especie vuelve a asentarse tras décadas de ausencia. La imagen se repite casi a diario: entre cuatro y seis cigüeñas sobrevolando o posadas en los campos de Salcidos, en A Guarda. Pero en lugar de nidos seguros, «algunas han comenzado a encaramarse a torretas eléctricas sin protección, exponiéndose a un riesgo claro de electrocución». Sobrino ha dado la voz de alarma tras días de observación directa sobre el terreno.
«Ahora que las cigüeñas vuelven a ser frecuentes en los campos de Salcidos, sería el momento de corregir los apoyos eléctricos que puedan suponer un peligro para su vida», señala. En redes, su mensaje ya ha comenzado a circular entre colectivos naturalistas y vecinales. «Solicitamos a quien corresponda que actúe con rapidez para evitar un desenlace fatal que parece solo cuestión de tiempo», insiste.
Sobrino ha consultado con con técnicos y expertos en avifauna. «Me confirmaron que efectivamente existen varios puntos críticos en los que podrían caer electrocutadas las cigüeñas. En la zona frecuentada por ese grupo de cigüeñas existen al menos diez apoyos eléctricos sin aislar, con mayor o menor riesgo para las aves», dice. La cigüeña blanca (Ciconia ciconia), ausente durante décadas en esta parte de Galicia, comenzó a asentarse en los últimos años a asentarse en diferentes puntos del área de Vigo. Esta primavera, una pareja hizo su nido en una chimenea cercana a la N-120, en Ponteareas. En Salvaterra otra lleva varias temporadas criando junto al paseo fluvial.