Arbo reparte 200 raciones de lamprea por hora

ARBO

M.Moralejo

Cientos de personas disfrutan de la edición más esperada de la fiesta

24 abr 2022 . Actualizado a las 15:49 h.

La lamprea de Arbo alimenta el cuerpo y el alma. Lo sabían los romanos, lo recordó el pregonero de la sesenta edición de su fiesta gastronómica, Sergio Pazos, y lo disfrutan cientos de comensales llegados desde toda Galicia y el norte de Portugal.

Sergio Pazos conquistó a arbenses y visitantes ensalzando las virtudes casi divinas del vampiro del Miño con un humorística adaptación del padrenuestro en la que la que la que la lamprea era el objetivo de sus plegarias. Sobre la antigüedad de la devoción a la protagonista de la jornada, Sergio Pazos, bromeó también comparándola con la intemporalidad de la reina de Inglaterra, Jordi Hurtado o Gayoso. 

M.Moralejo

El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, acompañado por el alcalde, Horacio Gómez, Navarra Castro, Ana Pastor, Marta Fernández-Tapias y alcaldes de ambas riberas del Miño, hicieron el brindis oficial del festejo tras visitar la Arbomostra.

Las expectativas son muy buenas. En dos horas y media se agotaron las empanadas y las raciones de lamprea salen a 225 por hora desde las once de la mañana. La preferida es a la arbense, cocinada en su propia sangre y acompañada con arroz, confirma Begoña Rodríguez, responsable del restaurante Os Pires, al frente también de la cocina de la fiesta. No temen quedarse sin existencias ya que tienen 400 lampreas para cocinar y otras 100 más por si hiciera falta. En la Arbomostra, bajo carpa cubierta, y con música en directo, la oferta gastronómica incluye además de la lamprea, en salsa, rellena con salpicón o en empanada, quesos, chorizos y jamones de la zona regados con los afamados caldos de la denominación Rías Baixas.

La fiesta incluye talleres en directo en los que cabaqueiros como O Buraco de O Rosal, muestra el arte de hacer tejas a mano. También se celebra, fuera del programa oficial, la despedida de soltero de Unai Luceta,  un joven de A Coruña, amante de la lamprea, al que sus amigos han sorprendido incluyendo en el fin de semana de fiesta, una degustación del.producto local.