Obligan a un joven de Redondela a entregar su móvil para descargar el vídeo de una agresión sexual a tres chicas
REDONDELA
La Audiencia autoriza a la policía a recuperar la grabación del dueño del teléfono, que habría difundido las imágenes por WhatsApp
04 jun 2025 . Actualizado a las 17:37 h.La Audiencia Provincial ha obligado a un joven de Redondela a permitir que la Policía Nacional descargue unas imágenes de su móvil. Supuestamente, con el teléfono grabó unas agresiones sexuales a tres chicas en unas fiestas en la Alameda en el verano del 2024. No pudo mostrar el vídeo, como le exigieron los agentes, porque se le agotó la batería. Ahora, la Justicia autoriza a la brigada UFAM (familia, mujer y menores) de la comisaría de Vigo-Redondela para que baje el vídeo y busque pistas que delaten al autor.
La policía pedía que el joven le diese las claves y contraseñas de su móvil para descargar el vídeo pero él se negó porque se vería implicado en otro delito distinto. Aunque no intervino en la supuesta agresión sexual, fue un testigo que, al parecer, compartió y difundió las imágenes íntimas en un grupo de amigos de WhatsApp para echarse unas risas, lo cual es un delito de revelación de secretos o de difusión de imágenes íntimas (sexting).
El 31 de octubre del 2024, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Redondela dictó un auto en el que autorizaba a los funcionarios de la UFAM a descargar dichos archivos del teléfono móvil del joven. Este se opuso y apeló a la Quinta Sección de la Audiencia de Pontevedra, con sede en Vigo, que, en un auto del 4 de febrero del 2025, avala la orden.
Los agentes requisaron el móvil al testigo pero este se quejó de que se lo habían incautado sin base legal para ello porque se lo retiraron policías locales de Redondela sin ningún tipo de garantía ni información, y sin un proceso de investigación abierto. La Audiencia le replica que, en realidad, al lado de los policía locales había también nacionales y que todo el grupo se dirigió a hablar con las tres chicas.
Una joven contó a los uniformados que un hombre le había realizado tocamientos y que otro individuo había grabado la situación y difundido las imágenes por WhatsApp. Los agentes localizaron al presunto autor del vídeo en las inmediaciones. Este explicó que en las imágenes se podía ver al presunto autor de la agresión sexual pero, al no tener batería en el teléfono, no lo podía mostrar. Los agentes le pidieron la entrega del terminal e hicieron un acta de intervención porque había sido usado para grabar a las chicas agredidas y luego por haber difundido el vídeo.
Sin embargo, para acceder al contenido del teléfono, la Policía Nacional pidió autorización al juez. La Audiencia concluye que el vídeo es «fundamental» para la investigación y la determinación de la autoría del delito contra la libertad sexual que habría sido cometido por un tercero no identificado y al que también siguen la pista. Unos meses después, la policía está pendiente de enviar al juzgado de Redondela su informe sobre las imágenes volcadas desde el dispositivo del testigo y que les permitirían identificar al autor de los tocamientos.
Fuentes próximas a la defensa sugieren que, en realidad, no se trata de una agresión sexual sino de un relación consentida.