Famosos y futbolistas han sido clientes de un local insigne
30 sep 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Una tabla de surf anuncia el nombre en la puerta. Pero esto no es Hawái, Uno de los bares más emblemáticos de Redondela echa el cierre esta noche con una gran fiesta tras 34 años de trayectoria. El Guay no tiene nada que ver con el surf y sí con la encarnación del espíritu de Redondela: una villa pujante en uno de los municipios más poblados de Galicia. Fue antiguamente cuadra y almacén de sal.
Josué echa un mano a sus padres detrás del mostrador. Allí atiende a los parroquianos que a la hora del café prefieren tomarse una cerveza. Pero sirven más cafés, unas 400 tazas al día. La propietaria del negocio, Eva Puertas, muestra el callo que le ha salido en la mano de tanto pulsar y manejar la máquina que elabora los expresos y descafeinados. El bar no ha sido nunca indiferente a los redondelanos desde que abrió sus puertas, el 13 de diciembre de 1991. «Yo siempre he ayudado a mi mujer, que es lo que hay que hacer en los matrimonios», comenta Pastor Alejandro, de 67 años y copropietario de un negocio que se desarrolla en un bajo de la calle Meixón Frío. Está en el epicentro del poder, a pocos metros del Ayuntamiento y de los tribunales. «Aquí hay reuniones de abogados y gente de los juzgados casi todos los días y también del Ayuntamiento».
El nombre del bar ya estaba cuando ellos cogieron el traspaso. La fidelidad con la propietaria del bajo ha sido prolífica y la simbiosis con el restaurante Barciela, situado a pocos metros ha catapultado a la fama al Guay que durante años ha servido los cafés y las copas de sobremesas del restaurante. Por el negocio han pasado personajes de la prensa del corazón y la nobleza, como Natalia Figueroa, esposa de Raphael. Natalia lo hizo cuando fue a apoyar a Aldeas Infantiles y estuvo en el Guay para impulsa la oenegé de Rita Regojo. «El primer día no sabíamos si iba a venir la gente al bar. Hoy podemos agradecer a todo el pueblo su respaldo. La gente nos agradece mucho lo que hemos hecho», cuenta la dueña.
Aunque el bar está en territorio celeste, ha sido frecuentado por estrellas del Superdépor, como Fran. «Nos metíamos con él porque le encantan los chocos de Redondela y comía muchos. Le decíamos: no vas a poder meter goles si comes tanto».
Otros jugadores, como Rivaldo o Djalminha han sido habituales del establecimiento del casco viejo redondelano. Venían a firmar contratos con su patrocinador Umbro, que ha sido una marca deportiva con sede en la villa. Pero no había solo deportivistas, el antiguo presidente del Celta Horacio Gómez «estuvo aquí cuando ejercía y cantamos con él la Rianxeira», recuerda Eva Puertas que se despide con tristeza pero también con el cansancio acumulado de pasar todo el día trabajando detrás de la barra. «Empezamos a las 8 de la mañana y cerramos tarde por la noche. Ahora me toca descansar».