Ni china ni japonesa, esta comida es coreana

Pablo Portabales PERIODISTA

YES

Marcos Míguez

20 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Los nombres de sus empresas son conocidos por todos. Las firmas automovilísticas Hyundai o Kia, la de televisores LG, o los neumáticos Hankook, por no hablar del gigante Samsung, Pero si les hablo de mandu, bibimbab, bulgogui, duruchigui o yapche seguro que a la mayoría no les suenan estos palabrejos de nada. «Somos famosos por nuestras empresas y somos grandes exportadores, pero es el momento de dar a conocer nuestra cultura milenaria y nuestra cocina», explican los propietarios del primer restaurante coreano que abre en A Coruña y uno de los pocos de Galicia. Se llama Seúl Soul y está ubicado en la calle Emilia Pardo Bazán, a pocos metros de la céntrica plaza de Vigo. Por el momento, como el resto de la hostelería, solo pueden servir a domicilio y esperan atender pronto en su local, presidido por una enorme bandera de su país y con una decoración con toque asiático pero nada recargada. Se nota que la pareja que lo regenta lleva años vinculada a Galicia.

COMIDA CALLEJERA

El dakgangiong es una fritura de bolas de pollo recubiertas de salsa dulce y con trozos de cacahuete tostado. Entre paréntesis indican que es un plato picante. «La carta tiene mucho de la comida callejera, que está muy de moda en nuestro país, y la cocina tradicional. A los coreanos nos gusta mucho el picante y todo lo acompañamos con arroz blanco», destaca Su Park, la mujer encargada de preparar en Galicia los desconocidos platos de su tierra. Lleva pocos años en España y le llamó la atención la cantidad de restaurantes japoneses que hay. «Estamos cerca de China y Japón y nuestra cultura es asiática, pero tenemos una gastronomía propia que es posible que nunca nos hemos arriesgado a mostrar», explica mientras me señala en la carta el nombre de mandu, que son las empanadillas coreanas fritas con carne de cerdo y verduras y acompañadas de salsa de soja. Son como las gyozas, pero desconocidas para el público occidental. «Nuestra propuesta no es ni china ni japonesa, es coreana», sentencia.

VAJILLA DE BRONCE

Cuidan los detalles. La preciosa vajilla es de bronce para que se conserve mejor el calor. Los cubiertos, de una madera elegante. «Los precios en algunos restaurantes japoneses están un poco desmadrados, por eso nosotros empezamos con una propuesta más contenida. Queremos que la gente experimente y se vaya familiarizando con nuestros platos». En la oferta incluyen vinos de arroz, de frambuesa y hasta una cerveza coreana, aunque hay las bebidas habituales de cualquier negocio. Eso sí, el hilo musical del local es innegociable. «Siempre va a sonar K-pop», sentencian. La música popular de Corea del Sur cada vez tiene más adeptos en el mundo. Su Park preparó para la foto yapche, jemulyon, bulgogui y duruchigui con la esperanza de que pronto nos aprendamos sus nombres, como sucede con los de otros países.