Alice y Morata: los expertos analizan cuánto de negocio hay detrás de una pareja aparentemente ideal

MARTA REY / M.V.

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Manuel Pinilla Cruces / Europa P

¿Pareja o negocio? Nos sorprende que rompan de repente tras jurarse amor eterno en su último «post». Tres expertas en relaciones afectivas, comunicación digital y márketing analizan por qué tantos famosos venden su amor mientras acuerdan los términos de la separación

21 ago 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Nos empeñamos en competir en las redes sociales por ver quién es más feliz o quién tiene más lujos. Sobre todo, si nos va bien en el amor. Pero a pesar de que se nos insiste en que lo que vemos en internet es solo la punta del iceberg de la vida de alguien, seguimos sorprendiéndonos cuando una pareja aparentemente ideal comunica de un día para otro que su historia de cuento ha terminado. El último terremoto mediático en este sentido fue el que arrasó con el matrimonio de Alice Campello y Álvaro Morata. Acababan de celebrar la Eurocopa posando como una familia idílica ante cámaras y flashes de todo el mundo. Su aparentemente eterna luna de miel copaba las redes sociales de ambos, hasta que el futbolista publicó un precipitado comunicado en las suyas anunciando la ruptura, al que seguiría otro diferente de ella.

 

Presumían de familia perfecta y de que no podrían vivir el uno sin el otro. Tras ocho años y una Eurocopa, pusieron fin de golpe a su relación.
Presumían de familia perfecta y de que no podrían vivir el uno sin el otro. Tras ocho años y una Eurocopa, pusieron fin de golpe a su relación. Europa Press Reportajes

Tan simbióticos durante su matrimonio como descoordinados a la hora de anunciar su separación. Como ellos, otras tantas parejas sacudieron antes la esfera pública de forma sorpresiva. Desde Rauw Alejandro y Rosalía con anillo de compromiso incluido hasta Chiara Ferragni y Fedez tras la caída a los infiernos de ella por su campaña publicitaria del Pandoro —dulce italiano similar al panetone— con falsos fines benéficos. Incluso matrimonios con solera —aunque no tan dados a exteriorizar su felicidad— como Sara Carbonero e Iker Casillas, o Enrique Ponce y Paloma Cuevas pillaron a España desprevenida.

Iker Casillas y Sara Carbonero enamoraron a toda España con su beso en el Mundial de Sudáfrica en el 2010. Once años después, se separaron de forma modélica.
Iker Casillas y Sara Carbonero enamoraron a toda España con su beso en el Mundial de Sudáfrica en el 2010. Once años después, se separaron de forma modélica. LECTURAS

«Siempre explico que las redes sociales son como una tienda. Tú cuando llegas, lo primero que ves y lo que llama la atención es el escaparate. Eso es lo que te hace entrar. Según la hora a la que vayas, estará todo más ordenado o más desordenado. Y otra parte es la trastienda que nadie ve, que esa es la realidad de las parejas», explica Andrea Vicente, psicóloga especialista en relaciones afectivas, autoestima y gestión emocional. Un cuarto que utilizamos para atrincherar todo lo que se sufre en la relación. «Son nuestros problemas de comunicación, familiares, intimidad, desconfianza... Eso nunca lo proyectamos al público porque no queremos ser juzgados. A ninguno nos gusta que hablen de nosotros en negativo porque en cierta medida afecta. Entonces, pocas parejas muestran sus problemas y, sin embargo, sería lo más normal, porque todos los tenemos», detalla.

Carencias internas

Mar Castro, experta en comunicación digital, coincide: «En las redes quieres mostrar tu mejor versión, empezando porque subimos la foto en la que salimos mejor. No es criticable en absoluto, siempre que esas fotos te describan a ti. Esas parejas que parecen maravillosas y al día siguiente rompen, solo están mostrando una cara de la moneda». A Vicente no le gusta generalizar, pero puntualiza algunos casos. «Sí que es cierto que aquellos que constantemente están mostrando y pierden mucho tiempo en crear un contenido idealizado para proyectarlo, seguramente tengan algún tipo de carencia en su vida real. Lo que hacen las redes es que el tiempo invertido en crear algo hacia afuera no me permite disfrutar de la experiencia y vivirla en el presente», matiza.

Ella ya tenía el anillo de compromiso en su mano cuando lo dejaron, a pesar de publicar su amor constantemente.
Ella ya tenía el anillo de compromiso en su mano cuando lo dejaron, a pesar de publicar su amor constantemente. CAROLINE BREHMAN

Nunca cuentan las causas de las rupturas y eso da pie a que el público imagine escenarios. «Yo lo denomino conciencia abstracta. Que cada uno interprete lo que quiera», cuenta Castro. «Al no haber dado las razones, lo que estás haciendo, una vez que eres una persona pública, es que puedan tanto criticarte como alabarte. Lo que pasa es que en las redes se ve un 2 % y se crean sesgos. Si una pareja pública lo deja, ya empezamos con lo típico de la infidelidad. ¿Y si realmente había problemas de comunicación o de otro tipo? En el caso de los deportistas como Morata, que viajan tanto, a lo mejor a la pareja le falta pasar tiempo de conexión emocional. El 100 % de la historia solo la conocen ellos», explica Vicente, que también advierte de la gestión de los comentarios si vas a hacer tu relación pública. «Es tomar un poco de autoconciencia. Tengo que preguntarme: ‘¿Soy capaz de digerir que el contenido que publique vaya a ser comentado?’. Si te genera ansiedad una crítica, entonces es que te afecta. Los dueños de nuestro bienestar somos nosotros mismos», opina.

Fueron el matrimonio ideal en las revistas durante 25 años... Hasta que apareció una joven Ana Soria.
Fueron el matrimonio ideal en las revistas durante 25 años... Hasta que apareció una joven Ana Soria.

Después del chaparrón, se comienza a trabajar en la imagen pública de cada uno. «Es mejor anticiparse a que surjan los rumores de la prensa. Por eso muchas veces nos sorprendemos de que aunque no haya indicios, sea la propia pareja quien lo diga en un comunicado de forma rápida, tajante y en tono amistoso, explicando que se han querido mucho. Al final, también es tratar tu imagen pública y dar esa sensación de que continuaremos siendo, en el caso de Alice y Morata, una familia feliz», afirma Yaiza Rey, directora de Seven, agencia de estrategia especializada en ventas y márketing de influencia. Muchas veces, parecen más preocupados por lo que dirán de ellos que por su expareja. «Yo lo que quiero es mantener mi reputación alta y positiva para seguir ocupando el papel que tenía en las redes», añade Castro. El problema aparece cuando se lanzan indirectas por esta vía. «Son dardos para que vean que la otra persona se portó mal conmigo y yo soy el bueno. Así busco que se posicionen», explica.

Puro márketing

Dime cómo te separas y te diré tu futuro económico. «A nivel de contratos con marcas, una ruptura mal gestionada puede hacerte perder mucho dinero», afirma Rey. «Tal vez el caso de Chiara y Fedez es diferente, porque se vio involucrado el tema del Pandoro, pero jugaron un poco al despiste diciendo que estaban dándose un tiempo y que no era definitivo. Ahí hubo demasiados factores que les hicieron perder el control de la situación con una guerra que les va a pasar factura. En el caso de Sara Carbonero e Iker Casillas, son personas que quisieron controlarlo, emitiendo un comunicado muy amistoso donde se veía un acuerdo entre los dos, aprovechando para cuidar su imagen hacia las marcas», detalla.

Se decían «Amore» todos los días en redes, pero la crisis del «Pandoro» terminó por dinamitar 7 años de matrimonio.
Se decían «Amore» todos los días en redes, pero la crisis del «Pandoro» terminó por dinamitar 7 años de matrimonio. MATTEO CORNER

Porque tu pareja puede formar un pack publicitario. «Al final la involucras en tu trabajo en redes. Hay marcas que se pueden inclinar más hacia ti dependiendo de lo que expongas y de cómo sea tu vida, porque así pueden llegar a un perfil específico de cliente. Si tú muestras a tu pareja, y esta se ajusta a que la puedas incluir en tus campañas publicitarias, genera más credibilidad», afirma. Justo la que pierden cuando se separan.