Los gallegos somos los que más horas dedicamos al ocio: «Cada vez más gente prefiere salir de día que de noche»
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Entre las actividades preferidas con amigos está la de salir a tomar algo; las comidas se reservan para las familias, y las cenas, para planes con la pareja, según un estudio
10 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.La forma de divertirse está cambiando. Lejos de la tradicional comida en un restaurante —que sigue contando adeptos—, la gente busca nuevas formas de pasárselo bien. Virginia Gardoqui, responsable de Daji Room, un espacio destinado a eventos privados, lo sabe de buena mano. «Se ve que ya no nos vale solo con comer algo y poner música. Ahora nos importa la decoración, cómo sorprender. Antes la gente celebraba yendo a un restaurante, y en la actualidad apetece una fiesta privada con amigos», contempla esta organizadora de eventos.
Coincide David Sánchez, de Pencil and Fork, quien cuenta la disparidad de actividades que tienen éxito en su local. «Una de las cosas que hacemos son fiestas internacionales. Celebramos el Año Nuevo chino, el Día de Francia o de la independencia de Estados Unidos —cuenta el responsable—, y ahí sí que vemos tanto un perfil de extranjeros que viven en A Coruña como de personas locales que buscan relacionarse con otra cultura e idioma», añade.
Se prefiere celebrar números redondos, como los 18, los 40 o los 50, y los talleres tienen una alta demanda. «Hemos hecho sesiones de coctelería; despedidas de soltera que hacen un taller de coronas; eventos de empresas con una sesión donde le leían su carta astral o cumpleaños, donde traemos a un chef privado, y es algo en petit comité», destaca. Lo importante es ser original.
Las tendencias en celebraciones van de la mano del interés general. «La gente viene mucho a planes de autocuidado, como un taller de belleza, porque cada vez hay más conciencia de ello», precisa la organizadora, quien explica que sucede lo mismo con sesiones dedicadas al brunch, de moda desde hace unos años. «Al final, la gente quiere experimentar — y como muestra de ello, dice— me han pedido un taller de sushi o de cerámica», expone esta profesional.
Laura Estévez, brand manager de Makkan Club, suma, a lo anterior, dos nuevas tendencias. En primer lugar, los cumpleaños infantiles: «Nos entra mucha petición de celebraciones grandes para niños. Las familias se gastan más dinero para que sus hijos tengan una gran fiesta como, por ejemplo, con el uso de hinchables», indica.
Una intención que no solo se ve en un público infantil, sino también en el adulto. Cada vez más se quiere hacer del cumpleaños un día único. En Pencil and Fork, por ejemplo, se han organizado eventos con la gastronomía tailandesa como protagonista o competiciones del conocido videojuego de Mario Bros. «La variedad que busca la gente es muy amplia. A nosotros nos funcionan muy bien yincanas gastronómicas o las cenas Cluedo, con mucho tirón entre despedidas de soltero o amigos», precisa Sánchez.
Todo ello, planes diurnos, que prueban la segunda tendencia a la que apunta Estévez: «Se nota que hay más gente que prefiere hacer cosas de día que de noche», describe. Incluso, aunque el ocio, en ambos casos, consista en tomar algo: «Este verano, por ejemplo, hicimos sesiones de tardeo con DJ, con muy buena acogida», añade.
Ni la lluvia nos frena
A los gallegos no los para ni la lluvia. Según el estudio Radiografía del ocio en España, elaborado por la consultora Atrevia para la Asociación de Bebidas Refrescantes, Galicia es la comunidad autónoma que más horas dedica al ocio entre semana. En concreto, el 43 % de los habitantes destinan más de diez, cinco puntos por encima de la media nacional. Sin embargo, quieren más. La investigación refleja que a algo más de la mitad, (a un 62 %), le gustaría poder tener más tiempo libre. De hecho, el 36 % reconocen que no desconectan de sus obligaciones los fines de semana. Las mujeres de 35 a 49 años son, en concreto, las que menos: el 51 % de las encuestadas en esta franja de edad disponen de menos de cinco horas.
Las principales razones no sorprenden. El poco tiempo libre se debe a la carga de trabajo, a las obligaciones familiares y a las responsabilidades domésticas, seguidas del estrés o la carga mental. Realidad que choca de bruces con la teoría: el 95 % de los participantes tienen claro que el tiempo de ocio es beneficioso para su salud mental.
No van mal encaminados. Un informe realizado por la profesora Anna Caballero de Psicología de la Universidad Internacional de Cataluña, donde analiza más de cien estudios en los que se correlaciona el tiempo, las actividades de ocio y la salud, concluyó que no son tan importantes las horas de tiempo libre, sino la calidad y la satisfacción que uno perciba de ellas. En este sentido, se encontraron diferencias según el tipo de actividad. Por ejemplo, aquellas que involucran aspectos culturales, viajes o actividades sociales tienen un mayor beneficio sobre la satisfacción y sentimiento de los individuos, que otras como ver la televisión o navegar por internet, que incluso se relacionaban de forma negativa con este bienestar.
¿A qué dedican los gallegos su tiempo libre? Las respuestas son variadas. La actividad principal consiste en salir a tomar algo y se relaciona con la hostelería. Así, el 44 % afirman que el plan preferido con sus amigos es el, ahora, denominado tardeo —según la Fundéu, «actividad de salir de tapas o de copas por la tarde»—; para un momento romántico, el 57 % optan por salir a cenar con su pareja; y una amplia mayoría, el 73 % reservan la comida para estar con la familia.
Aunque salir a tomar algo sea el plan preferido de seis de cada diez, viajar ocupa la segunda posición. Los gallegos, aunque en menor medida, también disfrutan de ver películas o series en casa; hacer deporte al aire libre; leer o hacer un plan cultural.
A su vez, la encuesta hace referencia a la idiosincrasia de la comunidad, ya que las fiestas populares son la opción favorita para un 10?% de los gallegos, un dato por encima de la media nacional. Es más, aquellos con más de 65 años son los que más disfrutan de las verbenas: un 13 % así lo dice, casi el doble que la media de España.
Llama la atención que, en todos los grupos de edad, se reduce la apetencia por el ocio nocturno. Así, siete de cada diez gallegos reconocen que ya no salen por las noches, o si lo sigue haciendo, es menos que hace un año.
Los motivos para celebrar también han crecido. Cualquier excusa es buena. Por eso, un 48?% reconocen que celebran los cumpleaños y un 21?%, las bodas. Estos dos son los eventos sociales con más tradición a nivel nacional. Sin embargo, otros han ido creciendo en popularidad. Por ejemplo, un 23?% dicen que también han estado en una fiesta cremallera —inauguración de pisos muy frecuentes entre jóvenes—, en babies shower —donde se celebra la llegada de un bebé—, o en eventos en los que se revela el sexo del bebé a familiares, amigos e incluso a veces, a los propios padres.
El tiempo no es una razón para quedarse sin un plan. Por ello, los gallegos son, junto a los valencianos, madrileños y vascos, los que menos se sienten condicionados por el clima.
Hasta los divorcios
Más allá de las fiestas importadas de Estados Unidos, la encuesta llama la atención sobre una tendencia creciente: la celebración de los divorcios. A nivel nacional, destaca, por cifras, la comunidad de Madrid, aunque en Galicia empiece a dar coletazos. Desde Daji Room, Gardoqui recuerda la ocasión en la que, un grupo de mujeres tenía planeada una despedida de soltera en su espacio. «Al final, no hubo boda, pero sí siguieron adelante con esta fiesta», precisa. La cuestión era celebrar.
De igual forma, desde Pencil and Fork, reconocen que, recientemente, han recibido una consulta sobre una fiesta privada para festejar una separación. «Eran los amigos de un miembro de la pareja quienes querían hacer el evento», comenta. Habrá que esperar para ver si otros hacen lo mismo.