La Xunta solicitará al Gobierno la creación de una base permanente de la UME y ya entrega las primeras ayudas

GALICIA
El presidente de la Xunta anuncia que la Xunta asumirá la gestión municipal de la limpieza de fajas secundarias. Besteiro y Pontón piden la dimisión de Alfonso Rueda
09 sep 2025 . Actualizado a las 13:08 h.Finaliza el presidente Alfonso Rueda una comparecencia que se extendió durante tres horas, después de las dos rondas de réplica de los grupos. «O pobo galego estivo á altura», agradeció Rueda, que se comprometió a trabajar por «reducir ao máximo que esta situación se volva producir». «O pobo galego deu exemplo de como traballar unidos», valoró.
El presidente de la Xunta emplea su último turno para insistir en la intencionalidad detrás de los fuegos, posición que Besteiro cuestionó con anterioridad. «Moitísimo coidado en falar destas cousas, sacarlle importancia a un tema que a ten», advierte.
Acusa a Ana Pontón de mentir al hablar de que existen ahora menos medios de extinción y menor presupuesto que en el bipartito.
«Carroñerismo político para tapar a súa incompetencia», acusa la líder del BNG a Alfonso Rueda, cuya intervención no estuvo a la altura, denunció Pontón. Lamentó que el presidente no reconociese errores en su gestión, y apuntó a la «irresponsabilidade» de no tomar ahora medidas. «O que vai vir é moito peor. E, a nós, dóenos Galiza», cerró su turno.

Besteiro recuerda las 123 medidas que incluía el dictamen de la comisión de seguimiento creada en el Parlamento gallego en el 2018 tras los incendios del otoño anterior. «Incumprimentos sistemáticos», reprocha el líder del PSdeG ante un dictamen que los socialistas apoyaron.
Recuerda que los socialistas ya reclamaron la creación de una base permanente de la UME en Galicia y que el Gobierno central, entonces con Mariano Rajoy como presidente, rechazó la propuesta.
Afea las críticas de la oposición y la ausencia de propuestas planteadas por Pontón y Besteiro. Rueda asegura que ya hay alcaldes agradeciendo las primeras medidas anunciadas durante su discurso inicial, y animó a más regidores a sumarse al plan de roces en las fajas secundarias.
El presidente del Parlamento interrumpe la sesión para reprendrer a la vicepresidenta, Montse Prado (BNG), que fuera de micrófono le recriminaba los tiempos empleados por cada uno de los portavoces. Miguel Santalices citó la duración empleada por los cuatro, prácticamente similar. «Escándalo é o que quere provocar vostede. Un pouco de respecto, isto é o Parlamento e eu son o presidente. Respécteme», reclamó, molesto, a Prado.
Vuelve a tomar ahora la palabra el presidente Alfonso Rueda.
El portavoz del PPdeG, Alberto Pazos Couñago, valoró que el primer minuto del nuevo período de sesiones arranque con la intervención, a petición propia, del presidente de la Xunta
«Galicia non arde, a Galicia quéimana», advierte a la oposición entre aplausos del grupo. Acusa de negacionista a Besteiro por rechazar el factor humano en el origen de los incendios, y considera «desolador» el empleo de bulos y demagogia que imputa a la oposición. «Dúas peticións de dimisión, cero propostas», lamenta.
Pontón vuelve a llevar al pleno la oposición frontal del Bloque al proyecto de Altri en Palas de Rei. Acusa a la Xunta de impulsar una «eucaliptización de Galiza en pleno cambio climático». «Isto, señor Rueda, é botarlle gasolina ao lume», advierte.
«Se vostede non pode, non sabe, ou non quere, póñase a un lado. Quen é responsable do problema non pode ser parte da solución. Dimita, señor Rueda», insiste la líder del BNG, a quien el presidente del Parlamento, Miguel Santalices, basándose en el reglamento de la Cámara, interrumpió tras agotar el tiempo de intervención.
«Esta vaga de lumes é consecuencia da súa incompetencia política, e por iso debe dimitir», apremió Pontón a Rueda. Enumeró la derogación de medidas contra la prevención de los fuegos, la reducción de efectivos o la retirada de servicios en zonas rurales, denunció. Acusó al presidente gallego de «chegar tarde» a ponerse al frente de la gestión de la extinción de los incendios.
«Esta foi a súa maior contribución a esta crise», le dice a Rueda la líder del BNG, Ana Pontón, ofreciéndole un chaleco amarillo, similar al que portó el presidente gallego durante la oleada de incendios desde el puesto de mando del Cecopi. Denuncia una estrategia propagandística para cubrir los problemas de la Xunta en la gestión de los incendios.
«Un presidente da Xunta non pode xogarse o patrimonio natural de Galicia baixo a teoría do malo será», reprocha Besteiro, que enumera los recortes de la Xunta en materia de prevención y extinción de incendios. «Debe marcharse, Galicia non pode permitirse unha nova traxedia», insiste.
«Vostede fracasou», comienza su intervención el líder del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, quien pide la dimisión de Alfonso Rueda. «Ninguén lle compra que os incendios fosen inevitables», dice el secretario xeral, que acusa al presidente gallego de no haber gobernado: «Por iso debe irse, hai tempo que abandonou as súas responsabilidades(...) A Xunta estaba tan pouco preparada como vostede».
«O negro das cinzas será só un paso previo ao regreso do verde, e ese obxectivo ilusionante debería movernos e motivarnos a todos», cerró Rueda su discurso, de poco más de una hora de duración, en el que desglosó la gestión realizada por la Xunta durante los incendios y avanzó las medidas que impulsará su Gobierno para la recuperación y la prevención de futuros fuegos.
Será turno ahora para los portavoces de la oposición. Cada uno tendrá diez minutos, pasando después a la réplica del presidente.
«Seremos áxiles no pagamento», avanzó el presidente, que lamentó que el Gobierno central no haya convocado aún las ayudas que prometió.
Se pidieron 41 ayudas para viviendas, trece de ellas para primera residencia acreditada. «As primeiras dúas axudas para reconstruír casas xa están concedidas. Xa poden ser aboados os correspondentes anticipios de ata o 100 %», anunció Rueda. Se solicitaron, además, 191 para explotaciones agroganaderas, 61 para forestales, tres para industriales y comercios, una para un tecor y otra para un concello.
Rueda hizo un repaso de las ayudas aprobadas para las víctimas de los incendios, con indemnizaciones de hasta 132.000 euros para la rehabilitación de una vivienda o compra de una nueva.
La Xunta colaborará con los concellos en las tareas de control del agua en los sistemas de abastacimiento. Se han creado ya barreras anticontaminación, cordones vegetales y barreras de madera para minimizar el impacto de las cenizas y del suelo erosionado, así como la preparación del suelo erosionado con la técnica de mulching.
Rueda también lamentó que solo el 0,5 % de los fondos Next Generation se hayan destinado en España a gestión forestal, reclamando una «rectificación urxente» para reforzar con estos fondos la prevención de incendios y la reparación de las zonas afectadas.
Alcaldes de las zonas afectadas siguen el pleno desde la tribuna de público. Entre ellos, la regidora socialista de Maceda, Uxía Oviedo, que viajaba junto a agentes forestales en un coche que terminó ardiendo en el monte, después de abandonarlo. También los presidentes de las diputaciones de Lugo y Ourense. El de A Coruña, Valentín González Formoso, sigue el pleno desde las oficinas del grupo socialista. El PP cuenta con casi medio centenar de alcaldes de Ourense.

Alfonso Rueda se dirigirá al presidente del Gobierno y a la ministra de Defensa para solicitar la creación de una base permanente de la Unidade Militar de Emerxencias (UME) en Galicia. En concreto, en el concello de Toén.
«Á hora de atacar os lumes non houbo cores nin bandos. Todos os profesionais, dependesen da Administración que dependesen, traballaron a unha para conter as lapas», reconoció. SIn embargo, lamentó el «curtopracismo, barullo e política de pancarta» tras no recibir la maquinaría específica solicitada al Ministerio de Defensa.
Rueda propone que se efectúen «lumes técnicos» en Red Natura entre los meses de abril y junio para minimizar los riesgos en verano. También elevar del 20 al 30 % la superficie de matorral que se pueda limpiar en los bosques.
«Debemos incidir na ordenación e no aproveitamento forestal», subrayó Rueda, que rechazó como remedio la plantación de «unhas especies en detrimento doutras», sino garantizar que las parcelas sean trabajadas y cuidadas. En lumes destas características, ningunha especie arbórea garante nin impide nada. O monte máis aproveitado é o que menos arde, señaló.
El presidente gallego anunció que se presentará al sector, antes de que termine el año, el borrador del futuro Plan director da industria forestal. Será «o instrumento que identifique as formas de aproveitamento do bosque» o el uso industrializado de este recurso natural, detalló.
Rueda incluye también otras medidas como el refuerzo de las tareas de supervisión, duplicando el número de inspectores y simplificando el procedimiento administrativo para que los particulares limpien los montes.
Se analizarán cambios normativas con los concellos para que las Administraciones puedan entrar directamente a limpiar las fincas situadas en lugares sensibles a los fuegos, donde los propietarios incumplan su obligación de mantenerlas en buen estado.
También se promoverá una modificación legal para que las comunidades de montes inviertan un porcentaje mayor de sus ingresos en la prevención y la adquisición de maquinaria. Rueda reclama una mayor colaboración de las diputaciones provinciales para cofinanciar la maquinaria a disposición de los ayuntamientos.
El presidente gallego anuncia que reforzará «de forma urxente» la gestión de las fajas secundarias. Se modificará el convenio para que la Xunta asuma las competencias en concellos de menos de 10.000 habitantes para ordenar la limpieza de estas fajas, cuyos trabajos llevará a cabo la empresa pública Seaga, pasando después la factura a los propietarios.
Junto a los concellos se identificarán las rozas más urgentes y prioritarias. También se impulsará la plantación de frondosas autóctonas en el entorno de las parroquias más afectadas, y se fijará la adhesión de los ayuntamientos al convenio de limpieza con Seaga. Además, se duplicará la cuantía destinada a labores de limpieza en el Fondo de Cooperación Local.
Lamentó que todavía hay 50 concellos que no se han adherido a las tarifas «moi bonificadas» que ofrece Seaga para los desbroces, lo que dificulta la vigilancia y ejecución subsidiaria de la limpieza de estas franjas.
Nuevo reproche del presidente a la oposición, en un discurso que ya supera los 30 minutos y en el que todavía no ha empezado a abordar qué medidas planteará su Gobierno para la prevención y extinción del fuego. Pidió dejar a un lado dogmatismos, visiones partidistas y la extracción de rédito político «con percorrido moi curto». «Este Goberno vai estar a altura deste reto», avanzó.
Con la despoblación y el cambio de usos en el monte jugando un papel principal en el origen de los incendios, el presidente autonómico enumeró medidas de su Gobierno para paliar sus efectos, como el banco de terras, incentivos fiscales en zonas rurales o políticas de creación de empleo. «Un rural con actividade vai ser sempre un rural de futuro. Un rural de postal é un rural condenado a esmorecer lentamente», avisó.
El presidente gallego habla de una «tormenta perfecta» en el origen de los incendios más devastadores desde que hay registros. Repasó un junio «extremadamente cálido», cuando la vegetación creció tras una primavera especialmente lluviosa. Se sumó la ausencia de precipitaciones, con solo un día de lluvia generalizada (19 de julio). Las temperaturas fueron también muy elevadas en agosto, tanto de día como de noche, junto a una humedad muy baja y rachas de viento altísimas. «Quen nega a influencia do clima en todo isto?», advirtió Rueda, que aclaró que su Gobierno no es demagógico ni está «fóra da realidade».
«Nin Galicia nin España en solitario poiden lograr impacto relevante nun fenómeno que ten incidencia a nivel global. Non podemos limitarnos a contar que o cambio climático é o responsable principal», añadió, acusando al presidente del Gobierno de limitarse a presentar un plan contra el cambio climático que considera méramente estético y sin medidas reales.
Rueda criticó los discursos que rechazan la relevancia de los pirómanos en el origen de los incendios: «Se nota que non están en Galicia e que non falan coa xente que sabe». Avanzó así la intención de su Gobierno de reforzar la vigilancia con cámaras en puntos estratégicos, potenciar la investigación, «todo o que faga falta». Un trabajo que ya está dando sus frutos, añadió Rueda, con 35 personas investigadas y 37 detenidas como presuntos responsables de causar incendios. El titular de la Xunta dijo esperar que la justicia caiga con todo su peso sobre los causantes de los fuegos.
El presidente gallego dice haber leído con atención las propuestas de la oposición. Considera algunas imposibles, y otras que sí se pueden llevar a cabo y coincidir con las planteadas por su Gobierno. Mostró así su intención de alcanzar acuerdos con BNG y PSdeG: «Espero que por unha vez estean a altura de todo isto». Rueda rechazó la petición de dimisión del BNG, que verbalizará Ana Pontón en su turno de réplica.
Rueda comienza recordando a los cuatro integrantes de los equipos de extinción que sufrieron queimaduras «moi importantes», tres de ellos aún están recuperándose en la unidad de cuidados del Chuac. Nin esquecemos nin esqueceremos o ocorrido, advierte el presidente, que pone cifras a los incendios: 62 concellos afectados en las cuatro provincias, más de 400 evacuados y más de 2.000 personas confinadas, con 144 viviendas afectadas por el fuego, de las que 13 eran viviendas habituales. Fueron arrasadas 120.000 hectáreas, el 31 % de las cuales eran superficie arbolada.
El presidente Alfonso Rueda sube al atril para iniciar una intervención sin límite de tiempo. Lo hace sin papeles ni anotaciones, estrenando una tablet con el discurso que ofrecerá al Parlamento en una comparecencia a petición propia para exponer la gestión de la Xunta durante la ola de incendios.
El primer pleno del Parlamento gallego llega marcado por los efectos de la ola de incendios de agosto. Arranca el curso político con la esperada comparecencia del presidente Alfonso Rueda, a petición propia y después de que los grupos de la oposición insistiesen en ello. Se espera un pleno bronco, ya que la líder del BNG, Ana Pontón, reclamará la dimisión del dirigente gallego. El PSdeG pide también responsabilidades, aunque sin apuntar a la cúpula del Gobierno.