La sentencia del Juzgado de lo Mercantil número 2 de Pontevedra destaca que «los términos contractuales pactados son totalmente claros, en cuanto a incluir dentro de la cobertura de riesgos la pérdida total del buque por naufragio»
La nave de recreo tenía como fecha prevista de retirada el lunes 11 de agosto, pero la falta de permisos obligó a que el reflote se pospusiese hasta cinco días después