La Festa do Marisco seduce cada vez más al turista extranjero

leticia castro O GROVE / LA VOZ

AROUSA

MARTINA MISER

En el recinto se dejaron ver, entre otros, estadounidenses, coreanos o suecos

07 oct 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

O Grove sigue aumentando este mes de octubre su tirón entre el turista extranjero, que al parecer se deja seducir por la Festa do Marisco, un buen síntoma ya que desde hace años el ejecutivo local persigue que la cita sea declarada de interés turístico internacional.

Estos días se han dejado ver por el recinto, visitantes de las más diversas procedencias conquistados con el producto que se sirve en la zona portuaria. Portugueses, franceses, ingleses, italianos o alemanes pululaban estos días por la Praza do Corgo con la intención de descubrir el paisaje de la localidad y a sus gentes, y ya de paso alimentar el estómago, que también es muy importante.

Quizás entre los europeos, esas nacionalidades se tornan ya frecuentes en el municipio en cualquier época del año, a pesar de que van llegando en algunos casos a cuentagotas. Pero lo realmente llamativo en esta edición de la fiesta es que también está recibiendo a estadounidenses, chinos, coreanos, chilenos o turcos, e incluso a suecos, canadienses y suizos, maravillados con el ambiente festivo y el producto servido bajo las carpas. También este lunes se dejaban ver turistas brasileños y mexicanos.

El incremento de extranjeros es un aliciente más para lograr la ansiada declaración, a la que sin duda ayudará desde ahora la nueva web de la propia cita gastronómica (www.festadomarisco.es), ya que es un requisito indispensable para la obtención de ese reconocimiento turístico.

Que la fiesta suscita interés, no cabe duda, quedó claro este pasado domingo, cuando al cierre los números arrojaban la friolera de 18.344 raciones vendidas, cifra que contribuyó a que este arranque sea el segundo mejor de la historia en sus sesenta y dos años de vida, con 62.565 platos servidos en las carpas, y eso que aún quedan por delante otros seis días para seguir despachando marisco. De seguir este camino la edición podría seguir la estela del año 2023— aunque esta vez no hay puente del Pilar— y batir nuevos récords.

Todo lo que rodea a la fiesta es atractivo para el visitante, más allá del sabor que sale de los fogones. El baile tradicional, los gaiteiros y pandereteiras, y la venta de artesanía que se comercializa bajo el amparo de esta celebración, como los collares de conchas, despiertan la curiosidad de todo aquel que aterriza por vez primera en la pequeña península arousana.

Toda esa actividad deja claro que la oferta cultural es, sin duda, otro de los ganchos sin los que no podría vivir la Festa do Marisco, que también crece de manera exponencial con la programación musical llevada a cabo en la carpa de conciertos, un cartel que funciona casi como una especie de festival integrado en el festejo gastronómico.

Este fin de semana artistas como De Ninghures, que subió a Ortiga al escenario, o Léon Benavente y Alberto&García, demostraron una vez más que la música marida a la perfección con el marisco.