El temporal vuelve a dejar sin luz a los vecinos de O Grove y provoca la caída de numerosos árboles

La abundante lluvia y los fuertes vientos que azotaron la ría de Arousa dejaron un reguero de incidencias a lo largo y ancho de la comarca de O Salnés. A la espera de la secuencia del temporal que se abatirá sobre Galicia el fin de semana, unos de los puntos más delicados se situaron ayer en Carril y en O Grove. En la primera de estas localidades, el tejado de la lonja sufrió fuertes daños. En la segunda, el protagonista volvió a ser el suministro eléctrico. Hasta un millar de clientes se quedaron a oscuras durante unas horas.

La avería se localizó en la zona de A Lanzada, de ahí que los afectados fueran los vecinos de Balea, en O Grove, y los de Noalla, en Sanxenxo. Esta es la segunda vez esta semana que la localidad meca se queda a oscuras.

También en Vilagarcía hubo varias incidencias. Un árbol se cayó en la circunvalación norte, informan desde el servicios de emergencias, que también tuvieron que asegurar una chapa en Sobrán. Además, un canalón y alguna de las chapas que componen la cubierta de la lonja de Carril fueron arrancados por efecto del viento. El servicio de Emerxencias e Protección Civil de Vilagarcía empleó su vehículo con elevador para retirar las piezas dañadas y evitar que provocasen problemas mayores al caer sobre la vía pública.

Esta noche también registró numerosas incidencias, aunque ninguna grave. Los Bombeiros do Salnés de los parques de Ribadumia y Vilagarcía realizaron una quincena de salidas para retirar, en su mayoría, ramas y árboles que se desplomaron sobre las carreteras. Los servicios de emergencias también atendieron numerosas llamadas para retirar señales, contenedores y elementos de algunas farolas que corrían peligro de desprenderse.

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