La autora del atropello múltiple de Vilanova declara que perdió el control del coche

Rosa Estévez
R. Estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

VILANOVA DE AROUSA

Martina Miser

Está investigada por lesiones por imprudencia y daños. De las 18 personas que resultaron heridas, están ingresadas en hospitales cinco; un niño de 14 años y con una hemorragia abdominal se ha llevado la peor parte

09 may 2023 . Actualizado a las 18:35 h.

Para esta tarde, a las siete, había prevista una misa dedicada a San Miguel en la parroquia de Deiro (Vilanova). Es más que probable que se suspenda. Las fiestas patronales se han visto envueltas en la tragedia: poco antes de la medianoche del domingo, un coche Smart, pequeño y automático, se adentró en el campo de la fiesta, colisionó y tiró una parte de la carpa y dejó a su paso un reguero de al menos 18 personas heridas. Once de ellas fueron evacuadas en ambulancia de un recinto convertido en un pequeño infierno de sirenas, luces azules y nervios a flor de piel. Otras siete se personaron por sus propios medios en los centros sanitarios de la zona, al presentar heridas de carácter menor: golpes y contusiones. A lo largo de la madrugada y de la mañana de hoy, muchas de esas personas han podido ya regresar a sus hogares, con el susto aún bien metido en el cuerpo. Según los datos oficiales facilitados por la Xunta de Galicia, cinco personas permanecen ingresadas, cuatro de ellas en estado grave «por diferentes fracturas».

El alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán (PP), lleva desde anoche pendiente de las noticias que llegan desde los hospitales en los que se encuentran ingresadas las personas heridas bien por el coche, bien por la carpa que se desplomó -hay dos en Montecelo, una en O Salnés, una en un centro sanitario de Vigo y un menor en el Clínico-. «Nos preocupan estas cinco personas, especialmente el niño que está en Santiago y una persona con un traumatismo craneal grave», señala el regidor. El menor es un rapaz de 14 años, natural de la parroquia de Corón, también en Vilanova, y cuyo estado preocupaba especialmente desde anoche: los testigos aseguran que se había clavado un hierro en el abdomen, lo que le había provocado una hemorragia. Esta mañana ha sido sometido a una larga intervención en el Clínico de Santiago.

Mientras los heridos luchan por recuperarse, en San Miguel de Deiro la conmoción es evidente. Esta mañana, algunas de las personas que anoche estuvieron en el recinto de la fiesta volvieron sobre sus pasos para intentar discernir, a la luz del día, qué era lo que había pasado. Gonzalo Durán considera que no hay que «buscarle más vueltas de las que tiene» a lo que ha sido, dijo, «un accidente muy grave». Al filo de las once y media de la madrugada, un vehículo Smart, pilotado por Digna Díaz, hizo una extraña maniobra: desde donde estaba aparcado, junto a una casa inmediata al campo de la fiesta, se adentró a toda velocidad en el recinto festivo trazando un sorprendente giro. En su interior estaba la conductora, una mujer de 82 años, y su marido, Luis Falcón, Falconetti, quien levantó desde Vilagarcía un pequeño imperio inmobiliario y hostelero después de los convulsos años 80, en los que fue condenado por un alijo de hachís que fue interceptado cuando estaba a punto de ser desembarcado en el País Vasco.

Según ha informado la Guardia Civil, la conductora, que anoche prestó declaración en el mismo lugar de los hechos, sentada en el interior de una furgoneta de la Guardia Civil y por momentos acompañada por familiares, alegó que había perdido el control del vehículo. A la mujer se le practicaron las correspondientes pruebas de alcoholemia y drogas, dando negativas ambas. Según explican fuentes oficiales, se la investiga como autora de un delito de daños y otro de lesiones por imprudencia. Anoche, en el campo de la fiesta, y esta mañana, en el mismo lugar, la gente reflexionaba sobre si es adecuado que las personas de avanzada edad sigan usando el coche. «Ya la noche anterior habían estado aquí, mirando la fiesta desde el coche», comentaban algunos de los testigos de lo ocurrido.

Al filo de la medianoche, y una vez evacuadas las personas heridas en el brutal accidente, efectivos del instituto armado tomaron muestras e intentaron recomponer lo ocurrido en el campo de la fiesta. Esta mañana volvieron al lugar de los hechos para seguir haciendo mediciones y recabando información sobre lo acontecido. De esa tarea se encargará el equipo de investigación del subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra.

El alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, explicaba que la comisión de fiestas de San Miguel tenía todo en regla, que el recinto estaba correctamente cerrado y señalizado y que el coche, simplemente, estaba donde no debía estar  y «entró donde no debía entrar», desatando un drama que mantiene a toda la localidad en vilo, pendiente de ese rapaz de catorce años que se ha llevado la peor parte.