Un joven mofortino está acusado de matar a su madre
01 feb 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Vuelve un jurado popular a la Audiencia Provincial. Esta vez para resolver el crimen de la escobilla. El imputado es un joven monfortino acusado por el fiscal de matar a su madre. Este es el segundo juicio con jurado que se celebra en la capital lucense en una semana. El anterior tuvo como protagonista a O Chucán, involucrado en la muerte a golpes de una prostituta, al que los jurados consideraron inocente. El vecino de Monforte acusado de matar a su madre en diciembre del 2008 en la casa en la que vivía la familia en el barrio de O Casar es Juan Diego García Pérez, que tenía 27 años cuando presuntamente cometió el crimen. Desde entonces, solo salió de prisión para comparecer en otro juicio por un altercado que había tenido con su padre antes de la muerte de su madre. La Fiscalía lo considera culpable de homicidio y pide para él una condena de ocho años de internamiento. Los hechos sucedieron durante la madrugada del 14 de diciembre de aquel año en la casa situada en el número 23 del barrio de O Casar. Según la Fiscalía, Juan Diego García agredió a su madre, Lupe Pérez, de 50 años, con el mango metálico de una escobilla pequeña de las que se utilizan para limpiar inodoros. Eran las tres de la mañana y en la casa solo se encontraban ellos dos. El marido no se encontraba allí y la hermana pequeña del supuesto homicida estaba en Monforte, a pesar de que en aquel momento estudiaba fuera, pero había salido y tampoco estaba en casa. El joven llevaba unos años a tratamiento psiquiátrico. Al parecer, después de cometer el crimen telefoneó a su hermana, que supuso que había pasado algo grave y volvió enseguida a su casa. Allí encontró el cuerpo de su madre con el rostro prácticamente desfigurado por los golpes y llamó por teléfono a la comisaría. La policía también había recibido poco antes un aviso del servicio de emergencias 112, al que habían llamado los vecinos, alarmados por los gritos que se oían en la casa. Los agentes que acudieron encontraron a Juan Diego García muy alterado y lo redujeron por la fuerza. Después, lo llevaron al hospital de Monforte y desde allí los médicos que lo atendieron pidieron su traslado a la unidad de psiquiatría de Calde, donde quedó ingresado. Pagos al padre y la hermana En el procedimiento penal abierto por este crimen actúan como acusadores la hermana y el padre de Juan Diego Pérez. Sus abogados están de acuerdo en calificar lo ocurrido como un homicidio y en la petición de condena que firma la Fiscalía. En cambio, reclaman indemnizaciones más elevadas Si la acusación pública propone imponer al acusado el pago de una compensación económica de 99.000 euros a su padre y de 17.000 a su hermana, el representante de los familiares plantea que sea de 100.000 euros para cada uno de los dos. En la petición de condena que efectúan las acusaciones consta que el internamiento se haga en vez de en una prisión en un centro psiquiátrico. La solicitud de pena también incluye una prohibición de acercarse a menos de cien metros de su hermana y su padre, que estaría en vigor durante nueve años. Este suceso causó en su momento una fuerte conmoción en el barrio de O Casar y en todo Monforte, donde la familia es muy conocida. El viudo de Lupe Pérez es el constructor Antonio García Montero.