La sala de exposiciones del faro camariñán acoge hoy a las 12.00 horas la inauguración de la muestra «Faro: reflexións dende o corazón da Costa da Morte»
01 ago 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Desde hoy al 30 de agosto • Inauguración a las 12.00 horas • El artista plástico Juan de la Colina (A Coruña, 1958) evocó ayer en Radio Voz el primer recuerdo que tiene de la Costa da Morte. Es un recuerdo de infancia. Había acudido con su madre, buscando esta saber de unos telares de lino, y acabaron perdidos por campos de Baio entre niebla y «lluvia infernal». Los auxilió un hombre a caballo. Subió al pequeño al animal y condujo a los viajeros al destino que procuraban. Años después de esto, ya de adulto, Juan de la Colina visitaba prácticamente todos los veranos esta comarca, y lo hacía de manos de un «gran artista y amigo», el pintor Antón Mouzo (Vimianzo, 1957-2007). Hacían cada año el mismo recorrido, desde la capital de Soneira a Camelle, Arou, Santa Mariña o Cabo Vilán, este último punto donde siempre daban por finalizada la expedición. La sala de exposiciones del faro Vilán de Camariñas, precisamente, será la que acoja desde hoy mismo, hasta el 30 de agosto, su exposición Faro: reflexións dende o corazón da Costa da Morte.
«Estoy tranquilo, porque la obra ya está distribuida en el espacio, pero bueno, nervioso también un poco», confesó en Radio Voz acerca de la apertura de esta muestra (12.00 horas) que es el fruto, más concretamente, de un año de visitas, observación y comunión con los habitantes y el territorio: «Todo lo que he contado son mis vivencias y mi pequeña historia personal, pero trabajando para este proyecto llevo desde agosto del 2023 hasta ahora». Todo el conjunto rezuma Costa da Morte, dice este doctor en Bellas Artes por la Universidade de Vigo, formado entre Barcelona, Madrid y Nueva York.
Fotografías y un cortometraje realizado para la ocasión, cuestión que reseña especialmente el autor, componen esta muestra que, además de suponer un acercamiento emocional, poético y antropológico al territorio, profundiza en las últimas investigaciones plásticas del artista. La simetría bilateral, sus límites, tiene peso en toda la exposición y es por ello que en las imágenes, muchas rescatadas de archivos, es frecuente ver una línea central vertical que las divide en dos, planteando al observador interrogantes e induciendo nuevas miradas. El cortometraje, por otra parte, son 11 microvídeos realizados en sucesivos viajes, una miscelánea de lo que Juan de la Colina percibió y sintió, todo registrado con el móvil. En ocasiones, una mirada poética; otras, más realista, pero siempre con sentido del humor y desde un posicionamiento comprometido empático. Salvo los lunes, se puede visitar la muestra de 10.00 a 14.00 y de 15.00 a 19.00. Gestiona la sala la Asociación de Empresarios de Camariñas.