Los hombres con mejor semen pueden vivir hasta tres años más

redacción LA VOZ

CIENCIA

El seguimiento de más de 78.000 hombres durante 50 años revela una asociación entre la calidad del esperma y una mayor longevidad

05 mar 2025 . Actualizado a las 17:43 h.

La calidad del semen está relacionada con la longevidad masculina, según el mayor estudio realizado hasta la fecha sobre este vínculo. La investigación, publicada en Human Reproduction, ha analizado los datos de 78.284 hombres a lo largo de 50 años y ha encontrado que aquellos con un mayor número de espermatozoides móviles pueden vivir hasta 2,7 años más que quienes tienen una calidad seminal más baja.

El estudio, liderado por la investigadora Lærke Priskorn y el andrólogo Niels Jørgensen, ambos del departamento de Crecimiento y Reproducción del Hospital Universitario de Copenhague-Rigshospitalet (Dinamarca), ha utilizado datos de hombres evaluados en el laboratorio público de análisis de semen de Copenhague entre 1965 y 2015.

Estos varones acudieron al centro debido a problemas de infertilidad en la pareja, lo que permitió contar con una muestra representativa de individuos con diferentes niveles de calidad seminal, desde valores óptimos hasta ausencia total de espermatozoides.

«Nuestro estudio confirma la hipótesis de que la calidad del semen está asociada con la esperanza de vida», señala Priskorn en declaraciones a la agencia de noticias científicas Sinc. «Calculamos la longevidad de los hombres según la calidad de su semen y encontramos que aquellos con la mejor calidad pueden vivir, en promedio, entre dos y tres años más que aquellos con los valores más bajos. Esta asociación no se explica por enfermedades previas ni por el nivel educativo de los participantes».

Los investigadores evaluaron el volumen del semen, la concentración de espermatozoides y la proporción de estos que eran móviles y tenían una forma normal. Durante el seguimiento, cruzaron los datos con los registros nacionales de salud de Dinamarca, lo que les permitió conocer cuántos de estos hombres fallecieron y por qué causas. En total, 8.600 de ellos murieron durante el período analizado, lo que representa el 11 % de la muestra.

Jørgensen destaca que estos resultados pueden servir para identificar a subgrupos de hombres con calidad seminal deteriorada que, aunque aparentemente sanos en el momento del análisis, podrían tener un mayor riesgo de desarrollar enfermedades en el futuro. «Las evaluaciones de fertilidad, que suelen realizarse en hombres jóvenes, podrían convertirse en una oportunidad para detectar y mitigar riesgos de salud a largo plazo», explica el investigador.

Sin embargo, el estudio no analizó si la mala calidad del semen se asocia con un mayor riesgo de muerte por causas concretas, como cáncer o enfermedades cardiovasculares, aunque los investigadores planean abordar esta cuestión en futuras investigaciones. También buscan identificar biomarcadores que permitan detectar a los hombres con mayor vulnerabilidad a desarrollar patologías, lo que podría facilitar la implementación de estrategias de prevención.

A pesar de la solidez del estudio por su tamaño y duración, los autores advierten de algunas limitaciones, como la falta de datos sobre hábitos de vida o sobre la salud general de los participantes antes de la evaluación seminal. Además, no se pudo diferenciar entre aquellos hombres sin espermatozoides móviles debido a una obstrucción en sus vías reproductivas y aquellos que los perdieron por otras razones.

En un comentario que acompaña al estudio, el profesor emérito John Aitken, de la Universidad de Newcastle en Australia, califica la investigación como un «hito» en la comprensión de la relación entre fertilidad masculina y longevidad. En su análisis, plantea varias hipótesis sobre los posibles mecanismos detrás de esta conexión, incluyendo factores genéticos, alteraciones en el sistema inmunológico, enfermedades subyacentes, el estilo de vida y la exposición a contaminantes químicos.