Jorquera, sobre el futuro de la fachada marítima de A Coruña: «Hai que fuxir de tentativas especulativas que convirtan as áreas portuarias en guetos para ricos»

A CORUÑA

ANGEL MANSO

El presidente de la Autoridad Portuaria se muestra «muy optimista» con la próxima cumbre y cree que se avanza «con buen paso»

15 may 2024 . Actualizado a las 12:36 h.

Todas las Administraciones implicadas en el desarrollo de la fachada marítima se han citado para abordar el futuro de los muelles tras veinte años de estancamiento. Representantes del Gobierno central, Xunta, Concello, Puerto y ADIF se reunirán el próximo miércoles 22 de mayo en María Pita para avanzar en el proyecto con el que se pretende llegar a un acuerdo sobre el diseño de los 800.000 metros cuadrados de terrenos portuarios interiores. El portavoz del BNG de A Coruña, Francisco Jorquera, se mostró «optimista» con la cumbre y aseguró en el programa Voces de A Coruña, de Radio Voz, que «se está constatando que hai disposición e que está imperando o sentido común», pero advierte que sin «corresponsabilización e acordo» de todos los implicados «vai ser imposible acometer esa tarefa».

Para Jorquera hay dos frentes principales a los que resulta necesario buscar una solución. Por un lado, la deuda de 286 millones del Puerto por la construcción de punta Langosteira, y por otro, las oportunidades de futuro que ofrecen los terrenos una vez queden liberados. Respecto al primero, el portavoz nacionalista insistió en que la deuda puede condonarse o buscar una solución equivalente que pase por una «contribución económica significativa por parte do Estado», algo que considera que podría hacerse con «vontade política». «A débeda contraeuse pola construcción do porto exterior, que foi unha decisión de Estado que anunciou o gobierno de Aznar tras un consello de ministros na Coruña. Que o Porto da Coruña tela que asumir esa hipoteca que lle limita moito a marxe de investimento non é de recibo», sostuvo, y volvió a equiparar la situación coruñesa con lo sucedido en Valencia. «O Gobierno central condonou a débeda de Valencia, que se cointreau no seu momento para acondicionar a zona máis embleática do seu porto para actividades que nada teñen que ver coas portuariase, en cambio, non ten a misma posición respecto a A Coruña. A disculpa é que os terreos de Valencia pertencen a un consorcio e por iso queremos constituilo aquí, para que non haya desculpas», añadió. Además recordó que en el acuerdo al que llegaron el BNG y el PSOE para investir a Pedro Sánchez como presidente «aparece taxativamente esa condición para que o Estado contribúa activamente á transofrmación dos terreos portuarios interiores». 

Sobre las oportunidades de futuro que ofrecen los terrenos portuarios interiores, Jorquera entiende que deben articularse en base a tres ejes: asegurar la titularidad pública de los terrenos, definir un plan de usos para toda esa área y aumentar las zonas verdes y espacios públicos. «Non hai que esquecer que o porto interior ten que seguir sendo porto e que hai actividades que non son extensibles a Langosteira», comentó. 

Las líneas rojas del BNG sobre los espacios futuros que quedarán liberados pasan por «fuxir de tentativas especulativas que convirtan as áreas portuarias en guetos para ricos», aunque se muestra a favor de construir allí vivienda de promoción pública o residencias para estudiantes. Además, aboga por aumentar las zonas verdes, espacios públicos, equipamientos en la línea del espacio expositivo de la Fundación MOP en el muelle de Batería o aprovechar infraestructuras como las ferroviarias para ofrecer soluciones de movilidad. «O cercanías podería chegar ata o corazón da cidade e incluso se podría recuperar o transporte marítimo», deslizó. 

«Cada un pode facer os debuxos que queira no borde marítimo portuario, pero se non hai corresponsabilización e acordo, vai ser imposible acometer a tarefa. Ten que imperar a sensatez, o sentido común e o interese público e deixar ao marxe a loita partidista a curto plazo», concluyó. 

El presidente de la Autoridad Portuaria de A Coruña se muestra optimista sobre la cumbre de la fachada marítima

«Los problemas, a veces, se vuelven oportunidades». Con esta frase resumió el presidente de la Autoridad Portuaria de A Coruña el objetivo que llevan las distintas Administraciones a la cumbre del futuro de la fachada marítima que se celebrará el próximo miércoles en María Pita. Ahí se celebrará el histórico encuentro para el que Martín Fernández Prado se muestra «muy optimista». Sobre todo, por la buena disposición de todas las partes para desatascar el futuro del borde litoral coruñés. La cumbre «es una gran oportunidad», manifestó. Ya la semana pasada el presidente del Puerto anunciaba que esperaba «trasladar pronto buenas noticias». También se mostró favorable a mantener la titularidad pública de los muelles, siempre que las Administraciones acepten una fórmula que ayude a la Autoridad Portuaria a afrontar la deuda de 280 millones de euros, contraída por la construcción del puerto exterior. «Vamos con buen paso», reveló el presidente sobre las conversaciones discretas para la futura urbanización de los terrenos.

Por su parte, el portavoz del PP, Miguel Lorenzo, apuntó que «el resultado de esa reunión tiene que ser positivo». «El tema del puerto es de ciudad, de implicarse todas las Administraciones y debe basarse en el dialogo, la confianza, la lealtad, de tener un proyecto claro y una hoja de ruta», remarcó Lorenzo, que añadió que «Inés Rey en su momento ofreció un acuerdo que no cumplió». «Vamos a darle un margen de confianza por el futuro de la ciudad y del puerto, que nos compete a todos», dijo.

«Todos sabemos que estos terrenos van a seguir siendo de uso público y quiero recordar que el único que ha hecho algo en el puerto ha sido el gobierno municipal del Partido Popular con la peatonalización de O Parrote y la Marina, soterrando el tráfico y estos terrenos siguen siendo del Puerto. Esa es la fórmula, este es el ejemplo a seguir, cuando hay consenso entre Administraciones se consiguen cosas. Trabajemos en esa línea, en el diálogo constante y en un proyecto común que nos jugamos mucho, el futuro hay que escribirlo con buena letra, sin prisa pero sin pausa», sostuvo.