A Coruña tiene mejores peatones que hace veinte años: las pasarelas ya no son una estructura fantasma

VIVIR A CORUÑA

En el 2003 La Voz constató que casi ningún viandante usaba estas estructuras, lanzándose la mayoría a la calzada sin ton ni son. Ahora hay más civismo «por la densidad de tráfico y porque somos más conscientes del peligro»

18 jun 2023 . Actualizado a las 10:36 h.

Hace veinte años La Voz alertaba de una práctica común en A Coruña, la de fingir que las pasarelas que cruzan avenidas no existen. Entonces, un redactor de este periódico comprobó que solo dos de cada diez peatones utilizaban estas estructuras, con el serio peligro que estos supone para quienes caminan pero, también, para aquellos que van al volante. En aquel momento, las pasarelas que se chequearon fueron las de Salgado Torres, San Cristóbal, ronda de Nelle, Matogrande, ronda de Outeiro y avenida de Arteixo. No todas siguen con vida. Es el caso de la situada en la Sagrada Familia, —se demolió en el 2021—, la de la Sardiñeira —desapareció el pasado octubre— o la de San Cristóbal —que mudó en una nueva con la llegada de la tercera ronda—. No hace falta irse tan lejos en el plano temporal para encontrar conductas de riesgo, pues en el 2019 se puso el foco en Marineda City, que tras ocho años de funcionamiento, seguía sin contar con un viaducto para garantizar la seguridad de los viandantes. En un tramo con tráfico intenso y seis carriles, no eran pocos los que se jugaban la vida abriendo boquetes en las vallas que dividían la carretera de Baños de Arteixo.

En la actualidad las cosas han cambiado, empezando por Marineda City. Ahora, pasarela mediante, es imposible cruzar estos carriles sin pasar por este viaducto porque las vallas se han reforzado y no hay manera de atravesarlas, pero aun sin obstáculos parece ser que, como peatones, nos ha invadido el civismo. 

Gente cruzando la mediana en la carretera que da a Marineda City
Gente cruzando la mediana en la carretera que da a Marineda City MARCOS MÍGUEZ

Silvia Vázquez, vicepresidenta de la asociación provincial de autoescuelas, explica que esto se debe, fundamentalmente, «a que tenemos más respeto por la seguridad vial y a que la densidad de tráfico actual no se puede comparar con lo que había en el 2003». Continúa: «Que haya más coches circulando aumenta el sentido del riesgo para los peatones; por ejemplo a nadie se le ocurre ahora cruzar por debajo de la pasarela de Matogrande a las dos de la tarde, o por Alfonso Molina, y antes sí». También cree que, hace veinte años, mucha de la gente que entonces tenía ochenta no tenía carné de conducir, «por tanto les era más difícil detectar el peligro porque no saben que no es tan fácil frenar a tiempo si ves a alguien cruzando una calzada, aquellos mayores tenían otra percepción», concluye. 

Información publicada en La Voz de Galicia el 22 de junio del 2003
Información publicada en La Voz de Galicia el 22 de junio del 2003

Consulta aquí la página completa publicada por La Voz el 29 de junio del 2003.

Matogrande

*Sobresaliente: de 30 peatones que cruzaron en 15 minutos, todos lo hicieron por la pasarela

La estructura que conecta Elviña con Matogrande fue la más utilizada según la publicación de La Voz del 29 de junio del 2003. Hace veinte años fueron 15 los transeúntes que, en un cuarto de hora, cruzaron este viaducto, cuyo preció superó los 600.000 euros, y tres lo hicieron incorrectamente. El pasado viernes fueron más de 30 los que cruzaron correctamente y ninguno lo hizo asumiendo un riesgo. Un apunte: en el transcurso del tiempo de observación hasta dos usuarios en bicicleta utilizaron el viaducto.

San Cristóbal

*Sobresaliente: de doce peatones que cruzaron, todos lo hicieron por la estructura bautizada como La Rosa

La puesta en marcha del enlace de la Tercera Ronda entre Lonzas y A Zapateira permitió que los barrios de Elviña y el Birloque quedasen conectados por un paso de cebra superior sobre la avenida de San Cristóbal. Es decir, ya no existe la estructura analizada hace dos décadas. Lo que sí hay es una espectacular pasarela, bautizada como La Rosa, que acapara miradas y que fue una de las estrellas del Congreso Internacional de Puentes Atirantados.

Desde luego que el diseño es singular, pero su forma curva hace pensar instantáneamente en los metros de más que se recorren por ella si se compara con la corta distancia entre las dos aceras de la avenida San Cristóbal. A pesar de esta reflexión, ningún viandante se animó a cruzar la calle indebidamente durante los 15 minutos de observación. Mientras que fueron doce los que lo hicieron por La Rosa. En la estructura analizada por La Voz hace 20 años, 14 cruzaron mal y dos bien. Un claro avance.

Ronda de Nelle

*Diez personas cruzaron por donde debían, seis no

En el tramo de esta calle más cercano a la Falperra es habitual ver a vecinos cruzar de una acera a otra sin demasiado temor. Y eso que para ejecutar esta acción hay que atravesar una zona de árboles y plantas, a veces, difícil de esquivar. La pasarela que va de la Falperra a Os Mallos la cruzaron el viernes en 15 minutos diez personas; siendo seis el número de viandantes que arriesgaron su vida atravesando la carretera por donde no debían, y teniendo un paso de peatones a escasos veinte metros. En el 2003 fueron 3 los que actuaron correctamente y 9 los que lo hicieron mal.

Salgado Torres

Este paso fue el menos utilizado en el 2003. En 15 minutos, solo una mujer utilizó la pasarela de Salgado Torres, mientras que otras 12 pasaron por debajo. Esa realidad no es trasladable a la actualidad. Además de las barreras de cemento que impiden el paso, la conexión con la tercera Ronda evita que cualquier peatón se lance a cruzar.