¿Por qué el ADIF es el dueño del local de la extinta cervecería Mahou de A Coruña?

Y.G.

VIVIR A CORUÑA

La desaparecida estación del Norte y resto de dependencias ferroviarias ocupaban buena parte de lo que hoy es la terminal de autobuses y el área comercial

22 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

La reacción fue casi unánime entre todos los coruñeses al leer que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) sacó a subasta el local de la conocida como cervecería Mahou de Cuatro Caminos: «¿Por qué el ADIF tiene en propiedad ese bajo?». La respuesta está en la ciudad de A Coruña de mitad del siglo pasado.

El inmueble en cuestión es un espacio de casi 2.000 metros cuadrados con acceso a las calles Alcalde Marchesi 21-25 y Avenida de Oza, 22. El ADIF lo ha sacado a subasta con un precio mínimo de licitación fijado en 1.365.130 euros. Es una iniciativa que se enmarca, explica el ente, en la puesta en valor del patrimonio inmobiliario de la entidad que no forma parte sustancial para el desarrollo de su actividad. La relación de este local con la actividad ferroviaria atañe al lugar donde se ubica.

Fuentes del ADIF, entidad pública empresarial adscrita al ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, señalan a La Voz que ese inmueble es una herencia que recibió en 2005 de la antigua Red Nacional de los Ferrocarriles Españoles, Renfe, fundada a comienzos de 1941, tras el final de la guerra civil española. En ese año, el transporte ferroviario del país inauguró un panorama nuevo, con el ADIF al mando de la construcción y mantenimiento de infraestructuras ferroviarias, y Renfe a cargo de los servicios de transporte de cercanías, regionales, mercancías y alta velocidad.

La propiedad que ha salido a subasta formaba parte de las dependencias ferroviarias, naves y de la extinta estación del Norte de A Coruña, que a mediados del siglo pasado ocupaban lo que hoy es la terminal de autobuses y el área comercial conformada por El Corte Inglés y el Centro Comercial Cuatro Caminos. Fuentes de ADIF señalan que, en ocasiones, la cesión de alguno de esos espacios, que la ciudad ganaba en detrimento de las vías, se hacía a cambio de propiedades en las posteriores edificaciones.

La terminal era el edificio insignia de toda la instalación ferroviaria. Se inauguró en septiembre de 1883 por Alfonso XII y con ella se abrió la línea Madrid-A Coruña. Estuvo activa hasta el 27 de enero de 1964, día en que quedó arrasada por un gran incendio que conmocionó la ciudad. «La confusión era enorme. Voces, gritos, órdenes y contraórdenes se confundían constantemente, sin saber muy bien qué atender primero», escribió la crónica de La Voz. La estación calcinada había sido construida por la Compañía de los Caminos de Hierro del Norte de España, empresa de ferrocarriles creada en 1858, que fue nacionalizada en 1941 y se incorporó a Renfe.

La Norte, aunque seguía en activo, había perdido importancia tras la inauguración, en 1957, de la línea Zamora-Ourense-Santiago, pues estos trenes ya salían de San Cristóbal, construida en 1935 y activa desde 1943. La noche del incendio, estaba a punto de salir para Ferrol el ferrobús. Minutos antes de las nueve, el edificio ya era pasto de las llamas.