La cara y la cruz entre los comerciantes de San Andrés: «Yo pude cerrar para ahora volver a abrir, pero otros no aguantaron»
![Yago Gantes](https://img.lavdg.com/sc/SrBSHSTevxNveIwOd6rOFxpdo_A=/75x75/perfiles/1669044960799/1672159620611_thumb.jpg)
VIVIR A CORUÑA
![Rosa Cerchar, copropietaria de la pastelería-café O Petit.](https://img.lavdg.com/sc/2lIffSJeyCou98k9iDveNtIlyaE=/480x/2025/02/11/00121739297701574661977/Foto/HF12C2F1_191332.jpg)
Las obras de humanización en la céntrica vía coruñesa entran en su fase final, al igual que los nuevos comercios que abrirán sus puertas una vez se reanude el tráfico
12 feb 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Las obras de humanización de la calle San Andrés, en A Coruña, avanzan a buen ritmo y están cumpliendo con los plazos establecidos. La primera fase de la intervención, que comenzó el 11 de marzo de 2024, tenía como objetivo completar la renovación total en los doce meses siguientes. Con la fase final a la vista, el bullicio de maquinaria y cemento está comenzando a dar paso a un futuro que los comerciantes esperan sea próspero, aunque no todos han podido aguantar el largo proceso de transformación.
Una de las tiendas que se ha visto afectada por la obra es Planeta Paraíso, que cerrará en las próximas semanas: «Estamos liquidando, la fecha exacta no te la podemos decir. La calle no es el único motivo del cierre, pero sí que animó bastante a cerrar. Además, a nivel comerciante no hubo ningún tipo de ayuda. Fueron ocho meses con la calle levantada», cuentan desde el establecimiento. El que no pudo aguantar hasta este 2025 es el restaurante It's Green.
Un caso similar es el de Rosa Cerchar, propietaria de la pastelería-café O Petit, ubicado en la plaza Pontevedra. En mayo de 2024 abrieron una segunda sucursal en San Andrés, pero seis meses después bajaron la persiana: «Estar abiertos era perder dinero». Así que decidió cerrar, pero siguió pagando el alquiler para reabrir una vez que las obras de la calle estuvieran acabadas. «Yo pude cerrar para ahora volver a abrir, pero otros no han aguantado», añade.
La reinauguración la tiene planeada para finales de mes y confía en que la renovada calle, con aceras más amplias, sea un revulsivo para los clientes. «Para mi tipo de negocio creo que va a ser positivo. La espera fue dura, pero es lo que nos tocó», afirma.
Los que están también ultimando la reapertura son los propietarios de Salpica Mar en Barra, una nueva taberna enfocada en los productos del mar, como el marisco o las otras. «Hemos visto que San Andrés es una calle que ha vivido varias rehabilitaciones de edificios en los últimos años y ahora esperamos que la parte comercial vuelva a ser lo que era hace años», cuentan sus responsables.
Otro comerciante que espera con ganas la apertura al tráfico es Óscar Castro, de Butcher Shop, que cuenta que el pasado año las ventas cayeron un 37 %. Sin embargo, ve con optimismo el futuro porque le gusta cómo está quedando la calle. «Me gusta que hayan aumentado las aceras, un centro urbano peatonal beneficia a todo el mundo», asegura.
Esa buena perspectiva reina entre los comerciantes de la vía, pero no todos lo han pasado de igual forma. David Otero, de DonPrint, señala que ellos no han notado tanto bajón porque su local no es tanto de compra impulsiva. «Aquí la gente viene porque necesita cartuchos de tóner». Lo mismo le sucedió a Guadalupe Ferreiro, de O Recuncho do Granel: «Quizá sí que se notó algo, pero igual solo fue de unos 100 euros al mes. Yo toco madera y con que la calle se mantenga como antes me llega».