Belén Cachafeiro descarta fijar carteras y dedicaciones de forma inmediata

Rocío García Martínez
Rocío García A ESTRADA / LA VOZ

FORCAREI

cedida

La alcaldesa esperará a conocer la situación del Concello y a definir los presupuestos

02 ago 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

La popular Belén Cachafeiro volvió a ocupar este viernes el sillón de la alcaldía de Forcarei tras seis años sentada en el banquillo de la oposición. En el primer día de su nueva etapa como alcaldesa. Cachafeiro apenas tuvo un minuto libre. Empezó a pasar revista a la situación económica del Concello, se reunió con el personal municipal, contactó con las primeras asociaciones y atendió a los medios de comunicación interesados en conocer la hoja de ruta del nuevo gobierno popular surgido de la primera moción de censura al abrigo de la sentencia del Tribunal Constitucional que deja en agua de borrajas el pacto antitransfuguismo de 1998.

La nueva alcaldesa no quiso desvelar de momento los detalles organizativos del nuevo gobierno que se está fraguando. De hecho, aseguró que está todo por hablar. Cachafeiro no aclaró si mantendrá el sueldo que ostentaba su predecesora en el cargo, la socialista Verónica Pichel, o si la cantidad percibida variará y tampoco avanzó si, además de su dedicación exclusiva, se aprobará alguna a mayores para algún otro edil. Cachafeiro tampoco desveló cuál será el reparto de carteras en la nueva etapa de gobierno forcaricense. Insistió en que todas estas cuestiones están todavía por definir y aseguró que no hay prisa alguna por concretarlas.

Presupuesto en marcha

«O pleno de organización [en el que han de fijarse todas estas cuestiones] é o que menos présa nos corre. Non temos unha data límite para convocalo e podemos seguir funcionando coa miña sinatura como alcaldesa. Imos priorizar as cousas verdadeiramente urxentes, como aprobar un presuposto municipal, que estamos sen el desde o 2019. Hoxe mesmo puxémonos a traballar no presuposto do 2025», anunció Belén Cachafeiro.

Respecto al reparto de áreas, la alcaldesa aseguró que «de momento non nos podemos permitir o luxo de que cada concelleiro se centre nunha área». «O que podo dicir e que hoxe estiveron aquí todos os edís facendo todo o urxente, fora do tema que fora. Estamos todos a todo para que o Concello non pare e, cando estea todo controlado, falaremos do reparto de áreas. Sinceramente, o reparto de áreas ou de dedicacións non foi algo que se falara en ningún momento. O que nos uniu e nos animou a levar adiante a moción foi que isto non podía seguir así: a nosa obriga era facer algo», aseguró la nueva alcaldesa.

El gobierno tiene previsto agilizar la elaboración del presupuesto y convocar en cuanto sea posible un pleno para su aprobación. Esa misma sesión podría aprovecharse para aprobar las cuestiones organizativas del nuevo gobierno. Los sueldos y dedicaciones, además, dependerán de la situación económica del Concello. «Estabamos contando co peor, pero non sei se a situación será peor do que contabamos», dijo Belén Cachafeiro. La alcaldesa no quiso ser alarmista, pero aseguró que la radiografía económica con la que se despidió Verónica Pichel «era un simple pantallazo dos cartos que o Concello ten no banco agora que acaba de cobrar os impostos». «O que non dixeron é todo o que quedaba sen pagar. Aínda non tiven tempo de repasar as dilixencias das facturas firmadas pola alcaldesa saínte con data de 31 de xullo, pero xa vin que deixou conformada unha relación amplísima de facturas que xa veremos que problemas lle supoñen ao Concello», dijo Cachafeiro. La nueva alcaldesa teme que tendrá por delante «seis meses para traballar sen un peso», pero está satisfecha por poder liderar un cambio de rumbo que considera vital.

Unas llaves sobre la mesa, un concello sin acceso a sus redes y un gesto simbólico

Como era de esperar por la crispación reinante en la corporación, el traspaso de poderes se hizo ayer sin ningún tipo de contacto entre la alcaldesa saliente y la entrante. «Non houbo traspaso. Saíron onte [por el jueves]do pleno antes do meu discurso e non souben máis deles ca unhas chaves da porta do Concello que me deixaron sobre a mesa», lamenta Cachafeiro. «Levo toda a mañá tentando falar coa empresa de comunicación para que nos dé as claves das redes sociales do Concello e ata o de agora non houbo maneira», comenta.

Cachafeiro empezó la jornada con una visita a Facenda para hacerse con el certificado de firma electrónica para que el Concello no vea paralizada su actividad. Después se reunió con el personal municipal. «Quero que me coñezan, aínda que a maioría xa me coñecen, e que saiban como quero que se traballe. No caso do persoal de desbroces, por exemplo, sei que lles deron vacación por horas extra, pero estamos en pleno verán e está todo sen desbrozar. Pedireilles aos que poidan que se reincorporen, compensándollo despois. Aos operarios quería comunicarlles que van ter o mesmo horario de verán ca o persoal funcionario, que non o estaban tendo, estaban entrando máis cedo», dijo.

El nuevo gobierno actuó ayer en pequeños asuntos urgentes, como la retirada de ramas en el acceso a Forcarei o el lavado de cara de Meavía para su fiesta. Pero además también tuvo tiempo para ejecutar acciones simbólicas. Como el traslado del sistema de grabación (que el anterior gobierno había llevado al salón de actos) al salón de plenos, para facilitar el acceso público a las sesiones y generar vídeo-actas.