O Muíño de Cuíña ampliará su oferta con zumos de arándanos

Rocío Perez Ramos
Rocío Ramos LALÍN / LA VOZ

LALÍN

Miguel souto

La firma lalinense comenzará a comercializar además grosellas frescas

20 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace unos días se inició en la finca lalinense O Muíño de Cuíña la recolección de los primeros arándanos de este año. Una producción ecológica de un fruto que, como define Eladio Cuíña, «es un tesoro para nuestra salud». Cultivados con mimo empezaron a llegar ya a los hogares de una clientela cada vez más extensa, que valora estos frutos ricos en vitamina K, vitamina C, magnesio y aportan fibra, valores apreciados por los nutricionistas.

La temporada de recolección de las seis variedades existentes en la finca ubicada en la parroquia de Prado empezó ahora y se prolonga hasta finales de julio o principios de agosto. Un período extenso ya que unas variedades maduran antes que otras y permiten que se vayan recogiendo de forma paulatina en un perfecto grado de maduración.

El año que viene, explica Eladio Cuíña, «sacaré más productos derivados del arándano como el zumo de arándano, arándano con manzana y grosella fresca». A través de la página web de O Muíño de Cuíña se lanzarán a toda España para su comercialización. Sus productos se venden además en la propia finca y en los establecimientos de Mimela, en A Estrada, y Piscofino, en Lalín.

En mayo del próximo año, explica Eladio Cuíña, «obtendremos el certifica del Craega, ya que la finca lleva ya tres anos en conversión ecológica y en ese mismo 2025 llegaremos al umbral de rentabilidad». Cuenta alcanzar ya la producción máxima de la finca en el 2026 y está prevista, añade, «la duración de la plantación de los arándanos durante veinte años».

En cuanto a la recogida de este fruto, Eladio Cuíña señala que «el invierno fue más largo de lo normal y la producción bajó un poquito. Debemos andar por los 6.000 kilos y en dos años esperamos llegar a los doce mil kilos y duplicar la producción». Desde octubre del año pasado, O Muíño de Cuíña ofrece también la posibilidad de que sus arándanos se puedan degustar todo el año. Desde esa fecha comercializan pulpa de arándanos envasada en tarros de 212 gramos, similares a los de las mermeladas.

La diferencia es que se ofrece un producto natural y tan rico en nutrientes y en cualidades como son los arándanos, simplemente cocido y envasado, sin añadir azúcar, lo que permite su empleo tanto en postres como por ejemplo en salsas o para disfrutarlo al natural.

Zumo de arándanos y manzana

Las grosellas que también se cultivan en la finca de Prado se venderán frescas y tanto el zumo de arándanos como el arándano mezclado con una variedad de manzana dulce se comercializarán también si azúcares añadidos y tendrán solo la fructosa que contiene la fruta al natural. Toda una gama de productos que por sus características, además de muy sanos y beneficiosos para la salud, pueden ser aptos para diabéticos.

Las innovaciones no se quedan aquí, dado lo delicado de este fruto. Eladio Cuíña señala que «estoy haciendo un centro de frío para que los arándanos no se estropeen». El encargado de hacer realidad este centro de frío es el empresario lalinense Ramiro Mejuto, de Megodeza, un experto en este sector y famoso por sus soluciones innovadoras y que, como dice Cuíña, «es un artista en esto».

Eladio Cuíña defiende los beneficios de buscar una actividad tras la jubilación como es su caso, tras décadas al frente de la firma Inasus, vinculada al sector primario y al campo. En la finca, a la que le dio una nueva vida con la plantación de arándanos y grosellas y que se unen a la producción de harinas artesanas de alta calidad, sigue disfrutando de la paz y la tranquilidad de un espacio idílico con un paisaje que enamora, a la vez que amplía una gama de productos que son una delicatesen para los consumidores más exigentes.