España se unirá a Francia para que se mantenga el nivel de ayudas de la PAC

Mario Beramendi Álvarez
MARIO BERAMENDI REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

ROI FERNÁNDEZ

Malestar entre los productores, que vaticinan una pérdida real del 17 % de lo recibido

04 may 2018 . Actualizado a las 09:52 h.

La propuesta de marco financiero para la futura Política Agraria Común (PAC), que prevé un recorte de los fondos del 5 % entre el 2021 y el 2027, desencadenó anteayer una rotunda respuesta de Francia, que llegó a calificar de «inasumible» el planteamiento. España ha sido mucho más comedida en su reacción. Y ello pese a que los recursos presupuestados prevén una caída del 3,5 % en las ayudas directas que percibirían los productores en el conjunto de la UE. La ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, garantizó ayer que el Gobierno trabajará para «consolidar» el nivel de apoyo a los agricultores y ganaderos españoles a través de la Política Agraria Común (PAC). Y lo hizo desde Bruselas, donde se reunió con el comisario de Agricultura y Desarrollo Rural, Phil Hogan, justo un día después de que la Comisión Europea presentase su propuesta financiera para el próximo período.

García Tejerina recordó que el Ejecutivo comunitario se había planteado en textos anteriores recortes de hasta el 30 % para la PAC, un escenario, a su juicio, mucho más «sombrío». «El trabajo del Gobierno durante estos meses ha dado sus frutos; la preocupación del Gobierno por los agricultores y los ganaderos significa que el punto de comienzo de las negociaciones sea mucho mejor», señaló la ministra, quien negó que se haya instalado ahora en una actitud conformista.

«Empezamos la negociación con el objetivo que siempre tuvimos, que es consolidar los apoyos que perciben hoy los agricultores y los ganaderos», insistió.

Para afrontar la negociación, García Tejerina precisó que trabajará «generando alianza» e incluso adelantó que «en breve» se reunirá con su homólogo francés, Stéphane Travert, con quien aseguró tener una «posición compartida» sobre el documento de Bruselas, que es «mantener el nivel de apoyo» para los agricultores y ganaderos.

Según el Gobierno, la estrategia sería reeditar la «alianza» forjada entre Madrid y París -y a la que posteriormente se unió Dublín- en la negociación agrícola que hubo entre el 2011 y el 2013.

Las organizaciones de productores y ganaderos en España sí mostraron ayer un contundente rechazo a la propuesta. Según COAG, los recortes en la PAC supondrían una pérdida real del 17 % de las ayudas para los agricultores; y el secretario general de UPA, Lorenzo Ramos, lamentó que «los agricultores y ganaderos sean, una vez más, los paganos de despropósitos históricos como el brexit, o que asuman el mayor gasto para frenar a las personas que quieren entrar en Europa». Asaja también definió la propuesta como «inaceptable».

Desde el Gobierno gallego, Alfonso Rueda mantuvo que todavía es muy pronto para hacer una valoración de la posición en la que quedará Galicia, pero aseguró que la Xunta hará «todo o posible» por alcanzar el nivel máximo de unos fondos que consideró «fundamentais para o noso o futuro».

El vicepresidente autonómico recordó que Galicia ya ejerció «presión» sobre Madrid y Bruselas cuando se diseñó el período económico vigente, unas gestiones que calificó de «exitosas» para el sector.