Los próximos presupuestos de la Xunta, dice el presidente gallego, incluirán esos fondos
10 ago 2018 . Actualizado a las 07:26 h.«Estoy viendo cómo lo puedo arreglar». Estas seis palabras de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, pusieron fin ayer a la intranquilidad que, personificada en el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, atenazaba a todas las comunidades autónomas ante la posibilidad de no percibir el próximo año una parte de la liquidación del IVA correspondiente al año 2017, concretamente la del mes de diciembre. Pero en la reunión que ayer mantuvieron Montero y Feijoo, y que se prolongó por espacio de dos horas, la ministra se comprometió a buscar una solución para reintegrar a las comunidades los 2.800 millones que, en concepto de IVA, peligraban, y que en el caso de Galicia le suponían un roto de 198 millones.
El presidente de la Xunta señaló que este primer encuentro con la ministra había sido «fructífero», y aseguró que se iba «más tranquilo» que cuando llegó. «Me quedo con el compromiso de la ministra y me marcho realmente convencido de que va a encontrar una solución», subrayó. Por ello, anunció que la Xunta elaborará sus próximos Presupuestos incluyendo ya esos 198 millones. Y es relevante porque el propio Feijoo había avisado que si no contaba con esos recursos tendría que volver a sacar la tijera.
Ambos políticos coincidieron en el diagnóstico del origen del problema: el cambio normativo en la gestión del IVA que aprobó el Gobierno del PP en el 2017, y que ha supuesto que la liquidación del impuesto en el 2019 sea inferior a la cifra inicialmente prevista por las comunidades. Y es que la puesta en marcha, en julio del pasado año, del suministro inmediato de información (SII), que supone la gestión del IVA de las empresas prácticamente en tiempo real, elevó en diez días el plazo de presentación de las declaraciones-liquidaciones para las sociedades acogidas a este nuevo régimen, de modo que en lugar del 20 de cada mes el límite es el 30. Esto provoca que la liquidación se haga efectiva el mes siguiente, lo que se traduce en que las comunidades no recibirían los ingresos correspondientes a diciembre, que pasarían a enero del ejercicio siguiente.
«Si no se compensase, sería un enriquecimiento injusto [de la Administración central] y una depreciación injusta en la financiación autonómica», explicó Feijoo al término de la reunión, abundando en que espera que a la vuelta del verano se resuelva. Aunque todavía no se sabe si la solución llegará vía Cortes o a través del Consejo de Ministros, dijo estar «convencido» de que será más pronto que tarde.
Desde el ministerio recordaron que la ministra, que previamente fue consejera de Hacienda de la Junta de Andalucía, ya había alertado del «efecto negativo» del cambio normativo del IVA introducido por Cristóbal Montoro, y había pedido «medidas compensatorias». Por ello, sabedora -por experiencia- de las estrecheces financieras de las autonomías, Montero «lamentó» una situación que las perjudica y le trasladó a Feijoo su compromiso de «explorar una solución dialogada y multilateral».
De hecho, el ministerio subraya que «desde el cambio de Gobierno se está trabajando en una propuesta que permita a las comunidades recuperar esos recursos», y actualmente «se están analizando los aspectos técnicos y jurídicos de la medida para revertir el efecto negativo» del cambio que la gestión del IVA tendrá sobre las finanzas autonómicas.
Sin trasfondo político
Aunque Feijoo no fue el único que alertó sobre la potencial pérdida de recursos de las comunidades, sus críticas fueron las que tuvieron un mayor alcance, amplificado después por el hecho de que el presidente asturiano, Javier Fernández, de idéntico color político que el Gobierno central, también reclamara una solución. Preguntado sobre si hubiera hecho la misma reclamación de gobernar el PP, Feijoo negaba que hubiera trasfondo político alguno: «Se lo plantearíamos a cualquier Gobierno central».
Insistió en que quería ser «muy respetuoso», pero la propuesta era de una «contundencia económica, financiera y política incuestionable», por lo que hay que reponer el dinero que corresponde a las comunidades, «que es el 50 % de las doce mensualidades del IVA devengado en España».
Montero y el presidente comparten que la reforma de la financiación debe «pensar en los 47 millones de españoles»
En su primer encuentro, el presidente y la ministra también abordaron otros asuntos, como la reforma de la financiación autonómica. Aunque Feijoo explicó que no habían hablado sobre si se iniciará o no en esta legislatura, celebró que ambos coincidieran en que el criterio con el que debe abordarse la reforma es el de pensar «en los 47 millones de españoles» y no «en las 17 comunidades autónomas».
«La ministra me ha trasladado que va a proseguir con los procedimientos, y el primero que se activará es el grupo de trabajo de la insuficiencia de recursos y también el envejecimiento poblacional», apuntó, recordando que Galicia tiene un 25 % de mayores de 65 años, frente al 19 % de España, con lo que implica en coste sanitario. «Vamos a estudiar cómo incluye este tipo de ponderaciones en la insuficiencia de recursos», añadió. Por su parte, según el ministerio, Montero destacó que el Gobierno ha mantenido «desde el primer día una postura leal con las comunidades», y le reiteró a Feijoo que el compromiso con la mejora de la financiación es «firme».
También hablaron de las compensaciones a las comunidades que, como Galicia, han cumplido siempre con los objetivos de déficit y no han requerido ayudas del Estado, como el fondo de liquidez autonómica (FLA) o el de pago a proveedores. «Después de las vacaciones se buscará la fórmula exacta para compensar lo que se conoce como condonación de las liquidaciones negativas, que para Galicia suponen 85 millones», explicó el presidente.