Puigdemont le recuerda a Sánchez que tiene un «Gobierno débil» y afirma que el pacto que hizo presidente a Illa «no se lo creen ni los que lo firmaron»

La Voz REDACCIÓN

ESPAÑA

Puigdemont, en las jornadas de trabajo que celebra Junts en la localidad belga de Waterloo
Puigdemont, en las jornadas de trabajo que celebra Junts en la localidad belga de Waterloo PABLO GARRIGÓS | Efe

Anima a sus diputados a convertirse en alternativa ante un Ejecutivo catalán «frágil»

02 oct 2024 . Actualizado a las 15:35 h.

El grupo parlamentario de Junts en el Parlamento de Cataluña se reúne este miércoles y jueves en Waterloo (Bélgica) con el líder del partido, Carles Puigdemont. A menos de un mes para la celebración de su congreso, Junts y su líder se ven las caras para decidir la línea estratégica a seguir en adelante tras la investidura de Salvador Illa (PSC) como presidente de la Generalitat. 

En este primer encuentro, Puigdemont ha instado a sus diputados a ejercer un rol de alternativa al Gobierno «frágil» tanto en Cataluña como en Madrid y aseguró que en el congreso nacional del partido, que se celebra este mes de octubre, se deberán renovar mensajes y liderazgos. El expresidente fugado sostiene que el Ejecutivo que lidera el socialista «se aguanta por un pacto de investidura que no se creen ni los que lo firmaron», en alusión al acuerdo suscrito entre el PSC y Esquerra.

Puigdemont también ha emplazado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a «hablar directamente» con Junts y a «no enviarle mensajes» a través del Cercle de Economía. El presidente del Gobierno viajó el lunes a Barcelona. Se reunió, junto al presidente de la Generalitat, con la junta directiva del Cercle. Sánchez abordó con los empresarios la cuestión de la financiación, que Junts pone sobre la mesa en la negociación de los Presupuestos, si el techo de gasto sale adelante. Junts ha sido muy crítico con el pacto alcanzado entre el PSC y ERC para la investidura de Illa, a cambio de una financiación singular, que los junteros consideran que está muy lejos del concierto económico que reclaman.

Tras retirar su propuesta de senda de déficit, para evitar una derrota parlamentaria, ya que Junts no estaba dispuesta a aprobarla, el PSOE se ha tomado un tiempo en la negociación con los independentistas y esperará a que acaben los congresos de Junts y ERC. Los posconvergentes celebran su cónclave entre el 25 y el 27 de octubre y los republicanos el 30 de noviembre. De ambos, se espera que salgan como presidentes de sus partidos, Carles Puigdemont y Oriol Junqueras.

Puigdemont ha advertido a Pedro Sánchez de que tiene un Gobierno «débil», lo que a su juicio le da una «oportunidad muy grande» a Junts. «Hay que saber aprovechar» esta circunstancia, ha emplazado al grupo parlamentario postconvergente. Sánchez no tiene mayoría absoluta, ha avisado, y eso en democracia «obliga». En concreto, sobre la negociación del techo de gasto, que no presupone un posterior apoyo a los Presupuestos Generales del Estado, como ha recordado en las últimas semanas, el líder nacionalista ha asegurado que Junts tiene que hacer el papel que no quiere hacer el presidente de la Generalitat: intentar conseguir más dinero para las instituciones catalanas, tanto el Govern como los ayuntamientos, y que tengan más margen de gasto. «Gobierne el PP o el PSOE, defendemos tener más dinero y crecer más en gasto», ha aseverado. El objetivo, ha dicho, es ser «útiles a los catalanes».

En clave catalana, Puigdemont ha situado a su partido como la alternativa a los socialistas. Ha pedido a los suyos que salgan de los «cuarteles de invierno» y pasen a la «ofensiva». «No nos lamentemos en la adversidad», ha reclamado a los suyos. Puigdemont ha exigido que Junts se erija en alternativa al PSC y que «combata al Govern de Illa».  El líder de Junts ha cargado con dureza contra al presidente de la Generalitat, al que ha acusado de querer «desnacionalizar» Cataluña, en lugar de buscar la normalidad institucional. Los socialistas, ha recordado, son los que se manifestaban con Sociedad Civil Catalana y los que hablaban de «desinfectar» Cataluña.