Las luces de emergencia V16: obligatorias en la guantera desde el 1 de enero pero «no se ven de día», según agentes de tráfico

ESPAÑA

Se colocan en el techo del vehiculo y lanzan destellos luminosos, estando además geolocalizadas y permitiendo ubicar el lugar de una avería o accidente. Sin embargo, la Asociación Unificada de Guardias Civiles cree que no suplen a los triángulos por completo: «se van a producir accidentes muy graves»
25 jun 2025 . Actualizado a las 08:27 h.Desde julio de 2023, en caso de que tengamos un accidente o una avería, ya no es obligatorio señalizarla con triángulos de emergencia en autovía o autopista si disponemos de una luz V16 homologada. Estos elementos reflectantes que llevamos en el maletero debían colocarse a 50 metros del vehículo por detrás en estas vías y también por delante en caso de carreteras convencionales de un solo carril por sentido. Aquellos que compraron luces de emergencia para suplir a los triángulos deben saber que a partir del 1 de enero de 2026, según informa la Dirección General de Tráfico, serán obligatorias, pero ojo, porque deben ser dispositivos conectados, capaces no solo de aportar visibilidad, si no también de enviar una señal a los navegadores y paneles informativos para alertar al resto de conductores de lo que nos ocurre y donde estamos. Que las luces V16 geolocalizadas sean «lo único permitido» a partir de esa fecha, liberará espacio en el maletero, pero no es ni barato ni tampoco, para algunos expertos, lo mejor para suplir a los antiguos triángulos.
Teóricamente, una luz V16 es más segura. Basta con bajar la ventanilla, encenderla y ponerla sobre el techo. Así el conductor no tiene que ponerse el chaleco, salir del vehículo, exponerse a las inclemencias del tiempo y arriesgarse a ser atropellado mientras coloca los triángulos. Sus destellos se ven a un kilómetro de distancia. Esta fue la premisa con la que una empresa viguesa, Netun Solutions, patentó uno de los modelos más conocidos en el mercado hace una década, Help Flash.
Obligatorio y caro
Pero las luces homologadas, que desde enero del próximo año tienen también que estar geolocalizadas parten, como mínimo, de unos 50 euros. Una tarifa que además no evitará en el futuro que tengamos que renovarlas. No porque se queden sin pilas o haya que alimentar su batería, si no porque contienen una tarjeta de datos que permite conectarla a la red para ofrecer sus servicios de conexión y localización. Y esta tendrá una validez determinada. En el caso de uno de los modelos de Help Flash, por poner un ejemplo, ya se señala entre sus prestaciones que «es un producto conectado por Vodafone que incluye un plan de datos hasta enero de 2038, ya cubierto por el precio del dispositivo». Después, aunque sean 12 años de funcionamiento garantizado, necesariamente habrá que pasar por caja. Ya sea para ampliar el período de suscripción, o para cambiar la propia luz. Mecánicos tan conocidos como Ángel Gaitán, el más seguido en redes en nuestro país, ya vende también este tipo de dispositivos, indicando en vídeo además cómo funcionan.
Inseguras según la Asociación Unificada de Guardias Civiles
Que esta baliza luminosa haya provocado que la DGT la instaure como obligatoria, no quiere decir que no existan voces críticas hacia ella. «Esa lucecita no sirve de nada si el vehículo se encuentra en un cambio de rasante o en una curva pronunciada», señalan desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles. Con los triángulos, era posible evitar este peligro, porque entre las recomendaciones para colocarlos, más allá de la norma de los 50 metros, estaba la de ubicarlos antes de la curva o el cambio de rasante previo a que el resto de usuarios de la vía se topasen con nosotros. Si en enero de 2026 ya no tenemos los triángulos, es algo que ya no se hará.
Por eso los agentes de tráfico representados en esta asociación, no dudan en señalar que «se van a producir accidentes muy graves y luego será tarde». Para ejemplificar su postura hacen referencia a los numerosos siniestros con vehículos «prioritarios» y equipados con luces, como sus propias unidades, ambulancias o grúas, que son golpeados igualmente cuando se encuentran parados en el arcén durante un operativo.
«Esperáis que vean un pequeño prioritario amarillo que muchas veces no se verá hasta que no estén encima», dicen, ilustrando la frase con un alcance trasero a un coche de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil con sus luces puestas. Su color las hace además difíciles de ver durante el día.
En marzo de 2024, un joven gruista de 31 años falleció en la A-6 a la altura del municipio lucense de Baralla cuando asistía a una furgoneta averiada. El camión que lo arrolló no vio las luces, de color amarillo, iguales en tonalidad que las de los dispositivos V16. Para evitar este tipo de accidentes, y que las grúas tengan mayor consideración durante sus operativos, el PP solicitó el año pasado en el Senado que sean consideradas vehículos de emergencia y empleen luces prioritarias azules como las de bomberos, fuerzas de seguridad y Protección Civil.