Dentro de los misterios, bodas y cocodrilos de las doce mansiones más bonitas de todo Narón

Patricia Hermida Torrente
Patricia Hermida NARÓN / LA VOZ

NARÓN

Belleza y decadencia en el interior de San Román, que se recuperará como vivienda turística.
Belleza y decadencia en el interior de San Román, que se recuperará como vivienda turística. JOSE PARDO

La historia «modernista y romántica» de los pazos nacidos para soñar; con su gloria, caída y otra vez gloria

18 oct 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

A un mundo ya desaparecido pertenecen las doce mansiones más bonitas de todo Narón. Junto a ellas sobreviven las escasas palmeras que no han sucumbido al picudo rojo. Y dentro aguardan 1.001 historias, algunas de fantasmas y cocodrilos. Desde joyas indianas a rincones románticos, antes de que el continente acabase hundido en guerras. Todas forman parte de una ruta de los pazos por Narón, que recorre 25 kilómetros por la céntrica carretera de Castilla y el rural. Desde la regionalista casona Mckinlay al chalé de los Antón, incluso con parada ante las cenizas de los palacetes ya arrasados. En un paseo sin igual para explicar la gloria, caída y de nuevo gloria de Narón.

La importancia de esta ruta diseñada por el Concello de Narón radica, según la concejala de Turismo, Natalia Hermida, «en que amosa a capacidade de parte da sociedade de finais do XIX e principios do XX para edificar estas construcións». Aparecen así «pazos modernistas, románticos, rexionalistas... todos forman parte dunha ruta paisaxística e arquitectónica moi especial; que cruza por unha parte urbana e tamén polo rural ata San Xiao e O Val».

Dormitorio principal en el torreón del hotel Pazo Libunca.
Dormitorio principal en el torreón del hotel Pazo Libunca. JOSE PARDO

Aquellos aventureros que quieran ejecutarla, con parada para comer, pueden partir del antiguo colegio de Nosa Señora de Chamorro casi en la frontera con Ferrol. Con estilo regionalista se alzó en 1931 a base de columnas, balcones y un torreón. Hasta hace poco era el chalé a la venta más caro de Narón por 750.000 euros, diseñado por Rafael González Villa. Muy cerca se erige la casona del militar Mckinlay (también llamada Villa Consuelo), y ya en O Alto el chalé de Antón ejerció de Casa da Cultura durante años. En Piñeiros, un grupo de casonas de labranza con enrejado recuerdan al extinto Pazo de Casal.

Pazo de Nelle, en Castro en cercana conexión indiana con Libunca.
Pazo de Nelle, en Castro en cercana conexión indiana con Libunca.

Ya en Xuvia, persiste el torreón de Casa Cáceres o el último castillo que llegó a alzarse en la comarca entre 1919 y 1920 sobre un enorme campo de cerezos. Por allí cerca también estaba otra especie extinguida como el Pazo de Cal con capilla, cochera, lavadero, antiguas carpinterías, y sobre todo una salida a la ría llamada La Pesquera.

La indiana San Román llegó a alojar cocodrilos disecados de Filipinas e imitaciones del diamante más caro del mundo. Ya en Castro disputan en belleza el pazo de Nelle, la casona de verano de los Pita-Romero o el pazo Libunca (hotel de 1918 donde se fusionan bodas, lunas de miel y jardines de ensueño).

El viaje finaliza ante el antiguo pazo de Baltar (siglo XVI) después reconvertido en monasterio, y en el Muíño do Vento del XVIII del que solo queda un torreón solitario ya sin aspas.