Canberra suma al apoyo de Sudáfrica y Gran Bretaña, el de EE. UU., Canadá, Alemania e India Aún navegan entre icebergs y las cubiertas de los barcos están repletas de hielo.
20 ago 2003 . Actualizado a las 07:00 h.El pesquero gallego con bandera uruguaya que Australia persigue como sospechoso de haber pescado ilegalmente dentro de sus aguas encontró ayer un buen aliado en la patrullera que le hostiga desde el pasado 7 de agosto. Y es que los oficiales del Southern Supporter fueron emitiendo por radio consejos a la tripulación del Viarsa 1 para que pudiesen abandonar las peligrosas aguas en las que se habían adentrado en su huida, una zona en la que el buque corría el riesgo de quedar atrapado por el hielo. Aunque no llegaron a tener contacto con la tripulación, el ministro de Justicia de y Aduanas de Australia, Chris Elliot, está convencido de que el asesoramiento de la patrullera fue decisivo para que ambos barcos pudiesen salir del atolladero en que estaban metidos: «Estoy seguro de que la tripulación está agradecida por una ayuda vital para su supervivencia», comentó. Aunque todavía se ven enormes icebergs y las cubiertas de las embarcaciones están repletas de hielo, el clima ha mejorado después de un día de navegación con rumbo al noroeste. La temperatura ha subido a menos nueve grados centígrados por el día y han podido avanzar 200 millas desde anteayer. La patrullera Southern Supporter continúa manteniéndose a distancia del Viarsa 1 , sin perder en ningún momento el contacto visual. Ayer navegaban separados por un kilómetro, pero sin decidirse a ejecutar el abordaje por las dificultades que esa empresa entraña. Mientras tanto, Australia prosigue con su actividad diplomática y sumando apoyos para capturar al palangrero gallego. La lista de países aumenta cada día. Además de Sudáfrica, han ofrecido su ayuda Gran Bretaña, que sopesa mandar a un barco desde las islas Malvinas, Estados Unidos, Canadá, Alemania e India. Pero si el Gobierno australiano está más que satisfecho con la actuación de la mayor parte de los países con intereses en la Convención para la Conservación de los Recursos Vivos de la Antártida (CCMLR), con Uruguay, el país cuya bandera ondea el barco, la polémica está servida. La Armada uruguaya que recibió a través del Ministerio de Relaciones Exteriores una denuncia desde Australia sobre la situación irregular del Viarsa 1 , informó de que investigará el caso una vez que la nave retorne a Montevideo, hacia donde se dirige el barco.