
El futuro presidente se mantiene firme ante el secretario de Estado de EE.UU. y el primer ministro británico Chirac y Schroeder ven factible una rápida aprobación de la Constitución.
24 mar 2004 . Actualizado a las 06:00 h.José Luis Rodríguez Zapatero se mantuvo firme ayer ante el secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, y el primer ministro británico, Tony Blair, y les explicó su decisión de retirar las tropas españolas de Irak el 30 de junio si la ONU no se hace con el control de la situación. Ambos mandatarios le aseguraron que trabajarán para encontrar una fórmula que evite la retirada. Por su parte, el futuro presidente del Gobierno se mostró conciliador y dispuesto colaborar activamente en la búsqueda de esa solución. Powell, que se entrevistó durante 15 minutos con el líder socialista, demandó a Zapatero que le explicara qué significaba exactamente que la ONU tenga un papel central en Irak y le transmitió la voluntad de su Gobierno de negociar una nueva resolución del Consejo de Seguridad que permita que los militares españoles sigan en aquel país. Para fijar cuál debería de ser el mandato de las Naciones Unidas en los campos militar y político, pidió reunirse inmediata y urgentemente con el próximo ministro de Asuntos Exteriores del Gobierno socialista. Puesto que ocupará Miguel Ángel Moratinos, que acompañó a Zapatero en sus encuentros con Blair, Powell, el presidente francés, Jacques Chirac, el canciller alemán, Gerhard Schroeder, el primer ministro polaco, Leszek Miller, y el jefe de Estado portugués, Jorge Sampaio. También fue el encargado de informar sobre el contenido de los mismos. Zapatero quiso dejar claro ante Powell y Blair que España tiene un compromiso total con la lucha contra el terrorismo. También que su apuesta decidida por la democratización y la estabilidad de Irak no tiene nada que ver con una hipotética retirada. Incluso recordó a Powell que el PSOE apoyó el envío de tropas a Afganistán cuando estaba en la oposición. El estadounidense se mostró dispuesto a compartir con el futuro Gobierno socialista sus estrategias, información, inteligencia y operatividad para luchar juntos contra el terrorismo. Sintonía total El primer ministro británico conversó durante 50 minutos con Zapatero, a quien no pidió que reconsiderara su decisión, sino que prometió que se empeñaría en encontrar una vía en la ONU que permita que se queden las tropas. La sintonía fue total en las entrevistas con Chirac y Schroeder, sabedores éstos de que el español ha expresado claramente su disposición a acercarse a Alemania y Francia, países que se opusieron a la guerra de Irak. El próximo jefe del Ejecutivo les trasladó su deseo de abandonar el concepto de Vieja Europa. Ambos políticos respaldaron a Zapatero y le expresaron su apoyo para que el Consejo de Seguridad emita una nueva resolución que dé un papel central a la ONU en Irak. En lo que respecta a la Constitución europea, los tres dirigentes constataron que es posible un acuerdo antes del 30 de junio, fecha en que termina la presidencia irlandesa de la UE. El primer ministro de Polonia, el país que más se opuso a modificar el reparto de poder establecido en el Tratado de Niza, también se comprometió en buscar un acuerdo en ese sentido. Zapatero abordó con Schroeder el futuro de las ayudas europeas a España y le anunció que negociará acuerdos transitorios para que la recepción de fondos no acabe de forma abrupta.