Grandes empresarios estudian dejar Galicia si la Xunta no rebaja el impuesto de sucesiones

Miguel Á. Rodríguez VIGO

GALICIA

Exigen rebajar el impuesto de sucesiones y donaciones como la mayoría de las autonomías El conselleiro de Economía llama a la moderación y sostiene que el tributo «no se puede suprimir»

01 jul 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

Grandes fortunas de Galicia han advertido formalmente al Gobierno de la Xunta que estudian la posibilidad de irse a otras comunidades autónomas si no se iguala el impuesto de sucesiones y donaciones (ISD) a la mayoría de las regiones españolas, que están apostando masivamente por reducir este tributo prácticamente a cero. Galicia está entre las seis zonas de España donde más se grava la riqueza y es una de las cinco áreas donde menos se ha corregido el ISD. El país es, además, el segundo más caro de Europa a la hora de heredar. Los empresarios consideran que la reforma legal se demora ya demasiado y ven además «insuficientes» las reducciones anunciadas por el PSOE. El conselleiro de Economía, José Ramón Fernández Antonio, escuchó de primera mano las airadas quejas de varios portavoces de importantes grupos empresariales gallegos, que fueron tajantes al asegurar que la posibilidad de una huida de capitales «es absolutamente real». Y la misma situación ha ocurrido con el conselleiro de Industria, Fernando Blanco, e, indirectamente, también con el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño. Hasta en cinco ocasiones este año se han producido conversaciones directas entre titulares de grandes fortunas y miembros del Ejecutivo gallego, para avisar a los responsables autonómicos de que el traslado de las sedes sociales industriales, o el cambio de residencia de algunas personas a otras comunidades, «es una salida que está siendo considerada muy en serio por algunos». Antecedentes La primera escena tensa ocurrió el pasado 13 de abril, durante una reunión mantenida en Oporto por la Asociación Gallega de Empresas Familiares. Hasta cinco empresarios y portavoces de grandes fortunas gallegas dejaron claro al conselleiro que, de mantenerse las diferencias actuales con regiones limítrofes o próximas, valorarán la posibilidad de marcharse. Delante había otra veintena de empresas representadas. El debate se agrió hasta tal punto que algunos asistentes solicitaron que se diera por concluida la discusión para evitar mayores tensiones. Fernández Antonio pidió moderación a los empresarios y explicó la reforma que plantea la Xunta, pero recordó que el impuesto «no se puede suprimir», ni está prevista una rebaja hasta límites como los propuestos en comunidades gobernadas por el PP. El titular de Industria, Fernando Blanco, ya ha admitido en varios foros ser consciente del riesgo de una huida de capitales. Pero tanto el BNG como el PSOE defienden la continuidad del impuesto, un tributo que catedráticos en derecho fiscal consideran «anacrónico» y «con los días contados». Las grandes fortunas son las más perjudicadas en la reforma de la Xunta, ya que se quedan fuera de las grandes exenciones. No sucede así en otras autonomías. Y basta así sólo un cambio de residencia o de la sede social de la empresa para eludir el agravio comparativo. En Galicia, el ISD recauda algo más de 140 millones de euros al año. Un 85% del ingreso lo aporta apenas un 10% de la población.