La planta de basuras de O Irixo recibirá 350.000 toneladas al año

Mario Beramendi Álvarez
mario beramendi SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Empezará a funcionar en el 2014 y generará 250 empleos

06 dic 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Una capacidad para tratar al año 350.000 toneladas de basura, un desembolso de 230 millones de euros y una generación de 250 empleos directos. Esas son las grandes cifras de la futura Sogama del sur, la planta que empezará a funcionar en el municipio ourensano de O Irixo en el 2014. Aún así, son insuficientes para las 640.000 toneladas de residuos al año que no recibirán un tratamiento. Después de semanas de incertidumbre, el conselleiro responsable de Medio Ambiente, Agustín Hernández, precisó el emplazamiento que había tenido en vilo a gran parte de la provincia de Ourense.

La propuesta es de la empresa Estela Eólica, que ya la presentó al concurso eólico del que fue adjudicataria, y cuenta con el apoyo de la Xunta y del municipio ourensano, en manos del PP. La planta de O Irixo para el tratamiento de residuos del sur de Galicia permitirá procesar, aproximadamente, un tercio de la basura que se genera cada año en la comunidad gallega, y que asciende a 1,2 millones de toneladas. Su capacidad es algo inferior a la planta de Sogama en Cerceda (A Coruña).

Agustín Hernández precisó ayer que la nueva planta no ha salido a concurso público porque no se corresponde con una adjudicación de la Xunta sino que es una propuesta empresarial que cumple con los requisitos en el Plan de Residuos 2010-2020. La Xunta ya ha comunicado a Estela Eólica su conformidad con el emplazamiento, en el límite de las provincias de Ourense y Pontevedra y en una zona próxima a vías estratégicas de comunicación, tanto por carretera (las autovías A-52 y A-53) como por ferrocarril. Será la propia empresa la que tenga que iniciar la tramitación urbanística y ambiental, procesos para los que la Xunta ya ha ofrecido su colaboración, aunque el conselleiro advirtió de que serán «esixentes para que se cumpra toda a normativa en vigor». El Gobierno gallego asegura que la nueva planta será un revulsivo para toda la comarca de O Carballiño y añade que la instalación se adelanta a las previsiones del Plan de Residuos, con un horizonte para el proyecto que llegaba hasta el 2017.

Esta lectura contrasta con las reacciones de la oposición. La diputada socialista Carmen Gallego asegura que la decisión supone perpetuar «o modelo fracasado de Sogama». Y el BNG rechaza la determinación de la Xunta de «apostar pola incineración».