La «low cost» se hace con el 26 % del mercado operando solo en una ciudad
13 ene 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Vuelco histórico en el mapa aeroportuario gallego. La compañía de bajo coste Ryanair acaba de arrebatar a Iberia su liderazgo dentro la comunidad, algo que nunca había ocurrido. Operando solo en una de las tres ciudades con terminal, Santiago, y en tiempo prácticamente récord, la empresa irlandesa ha logrado hacerse con algo más de una cuarta parte de todo el mercado autonómico. «Es la consecuencia natural de que haya competencia. Nuestra política coincide con lo que ahora quiere el cliente», valoró ayer la noticia, consultado por La Voz, el primer ejecutivo de la firma para la península ibérica, Luis Fernández-Mellado.
Según los datos oficiales difundidos por Aena, durante el 2011 volaron desde o hacia Galicia 4.453.383 personas, un 26 % de las cuales (casi 1,16 millones) lo hicieron a bordo de aviones de la citada low cost. Además, sus aviones aterrizaron y despegaron con niveles de ocupación entre notables y sobresalientes: de cada diez butacas disponibles, menos de dos vacías como promedio.
La antigua aerolínea de bandera, en cambio, hubo de conformarse con 1.062.241 viajeros movidos; esto es, la mitad que en el 2006 y casi 264.000 menos que a lo largo del 2010. Se quedó, por tanto, a 2,1 puntos porcentuales del nuevo líder del ránking de demanda en la comunidad, cuando en el 2009 lo había superado por 19,4. Tras Iberia en la clasificación se situaron Vueling, Spanair y Air Europa, con 653.433, 567.211 y 490.996 pasajeros, respectivamente. El sexto puesto se lo adjudicó Air Nostrum (160.223); el séptimo, Air Berlin (92.673); el octavo, Air France (89.478); y el noveno, Iberworld (65.689). Los restos del pastel (112.826) se los repartieron una decena de transportistas, entre ellos, Easyjet.
El año pasado Ryanair logró por sí misma un 18,7 % más de clientes que todos los operadores de Peinador juntos. Ello le valió para alzarse con una cuota de mercado en Galicia diez veces superior a la que había alcanzado en el 2005, el ejercicio de su estreno aquí. No en vano, su perfil de entonces poco o nada se parece al de ahora, pues llegó a Lavacolla para, con apoyo institucional, explotar solo rutas internacionales y ahora el negocio de las conexiones con el exterior apenas representa un 10,8 % de los billetes que vende en Santiago.
Sin escala, la empresa enlaza de forma incentivada Compostela con Milán, y Londres y Fráncfort, y lo hace sin patrocinio con Alicante, Barcelona, Gran Canaria, Lanzarote, Madrid, Málaga, Tenerife, Valencia y Sevilla. A finales de marzo suprimirá esa última línea y abrirá otra a Palma.