Lo que cuesta obtener un escaño: de los 23.000 euros para el Bloque a los 142.000 para el PSdeG

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Parlamento de Galicia

En las elecciones autonómicas del pasado julio, los nacionalistas hicieron la campaña más económica, pero más eficiente; el PP, la más cara, con más de dos millones de presupuesto, según el Consello de Contas

09 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

¿Cuánto le costó a cada partido obtener un escaño en el Parlamento de Galicia en las últimas autonómicas? Pues depende. En esas elecciones del 12 de julio, para el BNG supuso un esfuerzo medio de 23.707 euros por cada uno de los 19 diputados que consiguió; el PPdeG hubo de emplear el doble, 49.473 euros, en cada uno de sus 42 representantes; y al PSdeG-PSOE le costó seis veces más que los nacionalistas cada uno de sus 14 diputados: 142.462 euros por escaño.

Estos son algunos de los datos que se desprenden del informe de fiscalización que realiza el Consello de Contas después de cada campaña electoral sobre los gastos en qué incurrió cada partido, toda vez que la mayor parte de esa financiación procede de fondos públicos. Con dicho informe se intenta verificar que los gastos están correctamente documentados y registrados en la contabilidad, enumerando de paso las irregularidades o gastos indebidos que pueda apreciar, como ocurrió con un factura de 60 euros en desayunos declarada por el PP sin ser subvencionable, o con otra de 8.772 euros, perteneciente al PSdeG, relativa a un servicio privado de aviación entre los aeropuertos de Barajas y Lavacolla. Este informe solo recoge las cuentas de las marcas que obtuvieron representación (no incluye Galicia en Común, por ejemplo).

De acuerdo con la documentación de Contas, el BNG desarrolló la campaña electoral más low cost hace seis meses, y en los justificantes aportados por esta formación tampoco se encontraron «deficiencias de relevancia», refleja el informe de Contas. La organización que dirige Ana Pontón gastó 450.451 euros. Algo más de un tercio de esta cantidad —162.000 euros— corresponden a envíos de propaganda electoral a domicilio. Los nacionalistas no suscribieron ningún crédito para afrontar la campaña, y destinaron 35.000 euros a anuncios.

El PP tampoco da cuenta de operaciones de crédito con entidades bancarias para afrontar la cita con las urnas. A este fin destinó algo más de dos millones de euros, exactamente 2.077.871 euros, de los que 396.845 son de envíos de propaganda a domicilio. El partido de Alberto Núñez Feijoo gastó nueve veces más que el BNG en publicitar sus actos en medios —algo más de 310.000 euros—, y reservó otros 346.000 euros para el concepto de publicidad exterior, que básicamente alude a la instalación de vallas y banderolas en espacios públicos, un epígrafe en el que el BNG declaró un gasto de solo 3.811 euros.

El PSdeG-PSOE notificó, por detrás del PP, el segundo presupuesto más alto de la campaña, con un desembolso de 1.994.471 euros, lo que lo convierte en el menos eficiente de todos, si se tiene el cuenta la ratio por número de diputados, pues el promedio de este partido está en un gasto de 142.462 euros por cada uno de sus catorce diputados.

La formación que encabeza Gonzalo Caballero es la que más gastó (338.322 euros) en insertos publicitarios, y es también la que lidera el gasto por publicidad en banderolas y vallas, con 349.455 euros destinados a este fin. El balance contable de los socialsitas es el único que da fe de una operación de crédito bancaria, por importe de 8.804 euros, y también el único donde el Consello de Contas aprecia un gasto irregular o de justificación insuficiente, por valor de 15.209 euros.

El gasto electoral mudó ligeramente el pasado 2020 con respecto a las autonómicas del 2016. El PP sigue gastando un promedio similar por cada diputado: 46.578 euros en el 2016 por 49.473 en el 2020. El Bloque desembolsó en los actos electorales del pasado julio unos 120.000 euros más que en los del 2016, aunque al triplicar su número de escaños, el gasto promedio por diputado bajó de los 55.166 a los 23.707 euros. El PSdeG hizo el proceso contrario: su gasto en la campaña se disparó, al pasar de los 1,16 a los 1,99 millones de euros, logrando los mismos escaños: catorce.