Las colisiones en las bateas siguen sumando desgracias

Paula Mahía Gramajo
Paula Mahía REDACCIÓN/ LA VOZ

GALICIA

La parte norte de la ría de Arousa está salpicada de polígonos de bateas de mejillón.
La parte norte de la ría de Arousa está salpicada de polígonos de bateas de mejillón. Mónica Ferreiros

Los choques contra las mejilloneras no son infrecuentes y algunos de ellos resultan mortales

02 jul 2023 . Actualizado a las 19:19 h.

El accidente ocurrido en la tarde del sábado en Vilanova de Arousa, en el que una mujer de 54 años falleció tras colisionar la zódiac en la que navegaba junto a su pareja contra una batea, no es el primero ocurrido en la ría de Arousa. Multitud de accidentes sacuden las aguas arousanas.

Ni un año ha pasado desde la última tragedia que se produjo en la misma zona de Arousa, el 24 de julio del 2022. Un vecino de Madrid de mediana edad navegaba con su barco de recreo junto con otros cuatro amigos cuando chocaron contra una batea. Eran las dos de la tarde. Se dirigieron mar adentro tras disfrutar de la festividad de la Virgen del Carmen. Un acontecimiento esperado en A Illa en el que muchas embarcaciones aprovechan para salir al mar para seguir la procesión marítima. Salvamento pudo auxiliar al resto de los náufragos, pero no pudieron hacer nada para salvar la vida del hombre. Una de las personas que socorrieron la embarcación aseguró que no iban a gran velocidad, y que lo más seguro es que se tratara de un despiste.

Ya en el 2017 otra tragedia había sacudido las aguas de Pontevedra. El hundimiento del Nuevo Marcos se conoce como una de las mayores tragedias de la zona. Desde entonces se supo que había que hacer algo para frenar los accidentes en los polígonos de bateas. El naufragio costó la vida de tres personas. Un hombre de 37 y otros dos de 56 perdieron la vida en la madrugada de aquel 26 de abril. Se trataba de un barco pesquero en el que viajaban cinco tripulantes: dos de ellos consiguieron sobrevivir y dar la voz de alarma tras llegar a la orilla a nado. Este caso reavivó la demanda de soluciones para el balizamiento de la zona en la que se produjo en suceso.

La lista de accidentes en las rías es numerosa. En julio del 2014, dos marineros de Rianxo resultaron heridos al estrellarse contra una batea. El 18 de septiembre, otro barco naufragó en Muros también como consecuencia de la colisión con una mejillonera. Cuatro de sus tripulantes se salvaron, pero uno pereció. En O Grove, una pareja de jóvenes murió en el verano del 2001 al chocar la moto acuática en la que iban.