Cortada la A-6 a la altura de Becerreá por un desprendimiento de tierra que se llevó por delante un coche

La Voz LUGO

GALICIA

Óscar Cela

Los vehículos en sentido A Coruña son desviados 16 kilómetros por la N-VI. El suceso tuvo lugar en una zona en la que hace 14 años se produjo ya otro desprendimiento que mantuvo cortada la vía más de una semana

20 oct 2023 . Actualizado a las 13:50 h.

La A-6, a la altura del municipio lucense de Becerreá, permanece cortada en dirección A Coruña desde poco antes de las seis de la tarde de este jueves, después de que un desprendimiento de tierra se llevase por delante un coche y sembrase de escombro y piedras un trozo de la vía.

Todo el tráfico en sentido A Coruña está siendo desviado a la N-VI a la altura de Noceda, en el kilómetro 438. Desde ese punto, los vehículos tienen que circular unos 16 kilómetros por la carretera nacional, realizando la bajada de Doncos, atravesando As Nogais, circulando por el túnel y el viaducto de Cruzul y hacer la circunvalación de Becerreá para volver a retomar la autovía en dirección Lugo y A Coruña.

La circulación a estas horas de la mañana por la nacional está siendo fluida, aunque condicionada por la intensa lluvia y el fuerte viento, además de las restricciones propias de velocidad que tiene una nacional, con límites entre 90 y 60 por hora.

Una solución

Desde la Guardia Civil de Tráfico señalan que esperan que a lo largo del día, especialmente por la tarde, cuando suele haber más tráfico de vehículos, se pueda habilitar un tránsfer en la autovía y evitar así el desvío de 16 kilómetros por la N-VI. De esta forma, tal y como ya ocurre en las obras del viaducto de Trabadelo, se habilitaría la A-6 en doble dirección, ya que el tramo en sentido Madrid sigue abierto.

A estas horas de la mañana no hay movimiento de maquinaria para retirar la mole de piedras de pizarra y de tierra que cayeron sobre la autovía. Las malas condiciones meteorológicas, con fuerte lluvia y viento, no lo aconsejan. Existen dudas sobre cuándo se podría restablecer la circulación en este punto, donde ya hace 14 años hubo un derrumbe que cortó varios días la autovía. Serán los técnicos los que tendrán que evaluar cuál es la mejor solución para resolver el futuro de este talud.

La subdelegada del Gobierno en Lugo, Isabel Rodríguez, señaló que los primeros motivos que apuntan al derrumbe fueron las intensas lluvias caídas sobre la zona, pero ya dijo que los técnicos analizarán los motivos que causaron la caída del talud y cuáles serán las soluciones de cara al futuro.

Las incidencias del derrumbe

Se generaron varios kilómetros de retenciones y el tráfico se está desviando por la carretera nacional, pasando los vehículos por el túnel y el viejo puente de Cruzul. Ante las largas colas de coches y camiones embotellados, sobre las 19.45 Tráfico abrió la bionda que divide los dos sentidos de circulación de la autovía para poder redirigir a los vehículos permanecían embolsados en dirección a A Coruña. Esto ha provocado de forma momentánea el corte de la la autovía en dirección Madrid, ya que estaban intercalando unos y otros.

Mantenimiento de carreteras intenta despejar la vía para volver a ponerla en servicio lo antes posible, según indicaron fuentes oficiales, aunque a la vista de las dimensiones del derrumbe podrían tardar varios días. 

Abren la medianera de la A-6 para conseguir dar salida a los vehículos retenidos por la caída de un talud
Abren la medianera de la A-6 para conseguir dar salida a los vehículos retenidos por la caída de un talud Óscar Cela

El suceso tuvo lugar en el punto kilométrico 450 de la autovía, casi en el límite con el concello de As Nogais, y en una zona en la que hace 14 años se produjo ya otro desprendimiento que mantuvo cortada la vía una semana.

Llamadas de particulares y el conductor del coche, ileso

El desprendimiento tuvo lugar sobre las 17.45 horas, según consta en el servicio de emergencias de Galicia. A esa hora, varios particulares que circulaban por la autovía alertaron de que un desprendimiento de tierras había arrastrado a un vehículo y lo había dejado ladeado en la carretera, mientras los restos de tierra y piedras ocupaban toda la vía.

El propio conductor del coche, que resultó ileso, se comunicó a través del sistema «e-call» con la central de emergencias y les trasladó que se encontraba bien, pero que le era imposible poner el coche en horizontal. Desde el 112 trasladaron aviso a los servicios sanitarios, a los bomberos, a Tráfico y a mantenimiento de carreteras. 

Pasadas las siete de la tarde, los servicios de emergencia ya habían sacado el vehículo de en medio del escombro.