El ADIF definirá en septiembre cómo llegará la competencia a la línea de alta velocidad gallega

GALICIA

En la liberalización de media distancia y cercanías se aplicará el modelo concesional de los autobuses, con un solo operador por conexión
03 jun 2025 . Actualizado a las 19:32 h.El ADIF lanzó el pasado mes de octubre la segunda fase de la liberalización ferroviaria con una oferta de capacidad preliminar en los corredores de alta velocidad a Galicia, Asturias, Cantabria y Cádiz/Huelva, lo que supondrá añadir un máximo de 72 nuevos servicios diarios a la actual oferta que presta Renfe en régimen de monopolio. En el caso de Galicia, habría disponibles quince surcos por sentido entre A Coruña /Vigo y Madrid, y otro por sentido entre la capital y Ourense, el único para el que no sería necesario adquirir nuevos trenes de alta velocidad de eje variable, pues el recorrido se realiza en todo momento por vías de ancho internacional. Esta información preliminar sirvió a las empresas para conocer la oferta de rutas y las frecuencias, y así poder avanzar en sus planes de negocio.
Una vez recibidas las observaciones del sector sobre esta información preliminar, el segundo paso en el proceso de liberalización de la línea de alta velocidad a Galicia se producirá este verano, con varios meses de retraso sobre la hoja de ruta prevista. En unas jornadas organizadas este martes por la Comisión Nacional de los Mercados y a Competencia (CNMC) sobre la apertura del mercado ferroviario, el presidente del ADIF, Luis Pedro Marco de la Peña, aseguró que «en breve» revelarán «los criterios y normas que servirán de base para adjudicar la nueva capacidad». Es decir, las condiciones que guiarán el fin del monopolio de Renfe en el noroeste. El secretario de Estado de Transportes, José Antonio Santano, aseguró en el mismo foro que estos criterios se darán a conocer en septiembre. «Espero que se concreten nuevas ofertas de operadores privados que mejorarán los servicios», dijo Santano. El proceso de liberalización debería culminar a finales del 2026 con la firma de los acuerdos marco. Sin embargo, el acceso a los trenes de ancho variable podría demorarse hasta cinco años, dado el volumen de pedidos que tiene Talgo.
Sobre la liberalización de la media distancia y las cercanías, el secretario de Estado explicó que, una vez finalice el contrato con Renfe —termina en el 2027, pero probablemente se prorrogará hasta el 2032—, la competencia se configurará a través de un sistema similar al de las concesiones de autobuses. Es decir, se convocará un concurso público de cada una de las conexiones, las empresas interesadas concurrirán y la que gane prestará en solitario el servicio por un plazo máximo de diez años. No habrá por tanto varios operadores compitiendo en una misma línea, como sucede en los corredores de alta velocidad.
La presidenta de la CNMC, Cani Fernández, incidió en que los operadores que ya funcionan en España —Iryo y Ouigo—, así como los que entrarán en la segunda fase, se enfrentan a «barreras técnicas» como los tramos en ancho ibérico que hay en Galicia. En paralelo, recordó, Renfe deberá adaptarse a perder su posición dominante en monopolio y aprender a competir en el mercado.