«Para entender el conflicto entre israelíes y palestinos es necesario ponerse en la piel de los dos protagonistas»

Adrián Valiño / P. G. REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

El ex primer ministro Israel, Ehud Olmert (izq), y el político activista palestino de Jerusalén, Samer Abdelrazzak Sinijlawi, (d) se dan la mano tras su debate sobre la situación en Gaza en el Foro La Toja, en presencia del moderador y diplomático, Pablo García-Berdoy.
El ex primer ministro Israel, Ehud Olmert (izq), y el político activista palestino de Jerusalén, Samer Abdelrazzak Sinijlawi, (d) se dan la mano tras su debate sobre la situación en Gaza en el Foro La Toja, en presencia del moderador y diplomático, Pablo García-Berdoy. Martina Miser

El ex primer ministro israelí, Ehud Olmert, y el activista palestino, Samer Sinijlawi, protagonizaron un debate respetuoso y emocional en la séptima edición del Foro La Toja. Ambos apuestan por la solución de los dos estados y por cambiar los liderazgos

04 oct 2025 . Actualizado a las 20:21 h.

La séptima edición del Foro La Toja celebró este sábado por la mañana uno de sus eventos más esperados, el debate entre el el ex primer ministro israelí, Ehud Olmert, y el activista palestino, Samer Sinijlawi. El moderador era Pablo García-Berdoy, representante permanente de España ante la Unión Europea entre el 2016 y el 2021, y empezó el acto señalando que «la intención no es hacernos reproches o lamentar las oportunidades perdidas, sino pensar en el futuro». La conversación entre ambos participantes fue respetuosa, con numerosos momentos de gran carga emocional. La presencia de Olmert fue motivo de protesta por parte de un centenar de personas que se manifestaron desde O Grove hasta la isla de A Toxa.

Ehud Olmert fue alcalde de Jerusalén durante diez años, ciudad en la que nació Sinijlawi. «Hace dos años nos conocimos y nos hicimos amigos», resaltó el ex-primer ministro israelí sobre la relación entre ambos. Olmert inició su primera intervención comentando el ataque por el grupo terrorista Hamás el 7 de octubre de 2023, donde fallecieron más de mil israelíes: «Lo que ocurrió hace casi dos años provocó una guerra en Gaza que era inevitable. Fue mucho más allá de lo que habíamos sentido nunca, los objetivos eran civiles. La población estaba traumatizada». Recordó que, por aquel entonces, varios políticos internacionales como Biden o Macron declararon que Israel tenía derecho a defenderse y matar a los terroristas. «Se sabía que era muy difícil hacer esto sin daños colaterales con el resto de la población. El resultado es lo que estamos viendo a día de hoy». 

Por su parte, Sinijlawi habló un poco español -su abuela vive en El Teide- y avisó antes de su primera intervención de que iba a intentar no hablar de la situación de Gaza en particular. Ya en inglés, comentó que cuando era niño «nunca sentí tensión de ningún tipo, los judíos rezaban en las sinagogas, los cristianos en las iglesias y los musulmanes en las mezquitas. Durante la juventud descubrí el conflicto y nos dio una identidad. Fui a la cárcel con 25 años por arrojar piedras, pertenecía a un partido político palestino», relata el activista sobre sus primeros años de vida. Sobre la declaración de anoche de Hamás y la consecuente reacción del presidente de los EE.UU., Donald Trump, Sinijlawi declaró que, aunque parece que la guerra se está acabando, «ha entrado en una nueva fase complicada. Hay mucho trauma acumulado tanto del lado israelí como del palestino. Para entender este conflicto, es necesario ponerse en la piel de los dos protagonistas».

Avanzada la conversación, ambos participantes dedicaron bastante espacio de sus intervenciones al desafío en los liderazgos, tanto en el caso palestino como israelí. «Nosotros hemos sido rehenes de Mahmud Abas, hizo negocios con varios ministros de Israel y ninguno tuvo éxito. Igual sería positivo cambiar de líder y lo mismo ocurre en el caso israelí. El camino de las dos soluciones no pasa ni por Madrid ni por Washington, sino por empezar la reconciliación y sanar nuestros corazones, que están heridos», explicó Sinijlawi. Tras esta intervención, Olmert concordó con lo previamente expuesto por el activista y añadió: «Si queremos buscar un reparo político, solo está la opción de los dos estados y no como dice aquel muchacho que quiere sacar a los palestinos de Gaza [en referencia a unas declaraciones realizadas por Donald Trump]. Pienso que este señor es muy infantil si piensa que esto se supera así después de tantos años…»

Por último, Olmer transmitió un mensaje de unión y esperanza para ambas poblaciones afectadas por el conflicto: «No creer es renunciar a la fuerza motriz mas importante para el ser humano y me niego a rendirme a esta tentación. Debo creer todas las mañanas que esto es posible, me obligo a mantener vivo el sueño. Si no soñamos, ¿qué tenemos en la mente?, solo problemas e inseguridades, odio… El día para la paz entre Israel y Palestina está mas cerca de lo que ustedes piensan».