Un joven catalán cumple su sueño de pilotar en Nürburgring y lo hace en una mítica Citroën C15 de 1985

GENTE

Gerard Casals narró su aventura en redes sociales. Recorrió los 1.200 kilómetros que separan su casa del icónico «Infierno Verde» y completó el trazado en una furgoneta corriente, muy habitual hace más de dos décadas entre los autónomos españoles
06 ago 2025 . Actualizado a las 16:46 h.Quizás el vehículo más importante de la historia de Galicia, con permiso do carro que se pon antes dos bois, sea la Citroën C15. Sí, tan solo es una furgoneta y es de una marca francesa. Pero salió desde su nacimiento en 1984 de uno de los motores industriales de España, la fábrica de coches de Balaídos, en Vigo, que hoy pertenece a uno de los mayores grupos automovilísticos del mundo, Stellantis. Con componentes hechos en la comunidad y ensamblada por manos gallegas tuvo un éxito sin precedentes que traspasó fronteras: se vendieron 1.181.407 unidades en todo el mundo. Y eso que nació con un desarrollo sencillo, tomando la base del Citroën Visa, un utilitario que dejó de ensamblarse en 1988. La C15, sin embargo, estuvo en el mercado hasta 2005.
Una de ellas es ahora protagonista por haberse adentrado y completado el recorrido por uno de los circuitos más conocidos del mundo: Nürburgring, ubicado en la región alemana de Eifel. Su orgulloso propietario es un joven catalán de tan solo 20 años, Gerard Casals, conocido en Instagram como Kimet_99. Cuando se sacó el carné la compró, atraído por su historia y por una merecida fama de fiabilidad mecánica y robustez asociada al vehículo. Ni un deportivo, ni un compacto con siglas que aluden a la competición como GTI, FR, M, SLine o derivados. Él quería la C15 porque es de un pueblo de campo de la provincia de Barcelona y la usaría para labores agrarias y ganaderas. Para lo que fue pensada en su día. La herramienta de trabajo de miles de autónomos y trabajadores europeos.
Además de que necesitaba su capacidad de carga, como amante del motor, tenía la idea de participar en un rali raid por Marruecos y ahí, además de tener el vehículo que aguantar la dureza de los caminos, la arena y las altas temperaturas, es clave la sencillez mecánica. Poder reparar uno mismo las averías para seguir circulando.
Se le rompió el motor con 240.000 kilómetros
Con matrícula B-7297-GP, la C15 tiene 40 años a sus espaldas. El motor de origen se rompió con 240.000 kilómetros, algo poco habitual en una furgoneta famosa por su dureza. Transportar ganado, forraje y el tránsito por vías en mal estado acabó pasando factura. Fue entonces cuando Gerard decidió que su polivalente vehículo merecía un extra de potencia. Le puso el motor 1.9 turbodiésel de un Xsara con ciertas modificaciones, llegando así hasta los 100 caballos, muchos más que los 69 que tenía el bloque más potenciado de las que salían de las líneas de montaje en Vigo. Mejoró también las suspensiones, retiró elementos de confort como el aire acondicionado o la bomba de la dirección asistida y aligeró un conjunto que ya era liviano al salir de fábrica con menos de 900 kilos. Ahora, claro, tocaba ponerla a prueba.
La atracción de Nürburgring
El debut en circuito de la furgoneta no iba a ser cosa menor. Gerard escogió el autódromo más largo del mundo con más de 20 kilómetros de longitud, 40 curvas a la izquierda, 50 a la derecha y 300 metros de desnivel en su trazado. El mismo lugar que creado en 1927 acoge la conocida prueba de resistencia de las 24 Horas de Nürburgring. Se corrió también la Fórmula 1 hasta 1976. Ese año, el grave accidente sufrido por el austríaco Niki Lauda en su Ferrari, que le provocó graves quemaduras, supuso el abandono para esa competición del trazado alemán. Ciertamente técnico y adecuado para conductores experimentados es apodado como el Infierno Verde. Casals recorrió los 1.200 kilómetros que separan su casa de este lugar para demostrar que la C15 también puede rodearse de superdeportivos aunque no sea su hábitat natural.
Creadores de contenido especializados en el mundo del motor como Axel Espxnur se interesaron por la historia. No solo condujo él, la cosa no quedó ahí, porque Gerard permitió ponerse al volante de la modesta furgoneta incluso a Misha Charoudin, conocido piloto y youtuber famoso a nivel mundial por haberse puesto al volante de cientos de vehículos diferentes en el circuito alemán. Con Mischa pilotando y Gerard de copiloto, la C15, en una de las rectas, llega a rebasar los 180 km/h en su velocímetro.