Sisto: «No tengo problemas»

La VOz VIGO

GRADA DE RÍO

M.MORALEJO

El danés se incorporó al trabajo ocho días después que sus compañeros

20 may 2020 . Actualizado a las 11:54 h.

La situación de Pione Sisto y lo que ha ocurrido con él en los últimos días sigue siendo una incógnita. Sin embargo, la aparición del jugador ayer en A Madroa despejó el interrogante de cuándo iba a retomar el trabajo. El jugador se presentó temprano en las instalaciones de Candeán, dispuesto a integrarse en el primer turno, y no tuvo inconveniente en atender a los medios presentes. Aunque brevemente y sin aclarar demasiado.

Estaban recientes las palabras del presidente del club, Carlos Mouriño, indicando la semana pasada que el jugador tiene «un problema» sobre el que el Celta no puede pronunciarse públicamente y que «no está colaborando con el club para resolverlo». El extremo danés negó la existencia de tal cuestión. «¿Si tengo algún problema? -repitió la pregunta ante las cámaras de la TVG con aparente sorpresa-. No tengo problemas. Es un asunto que debemos resolver entre el club y yo», zanjó con tranquilidad y portando mascarilla, aunque vestido con ropa de calle (en teoría los jugadores deben llegar desde sus casas ya con las prendas de entrenamiento).

Más allá de este asunto, el internacional con Dinamarca se mostró «muy contento» por volver a ejercitarse y aseguró que tenía «muchas ganas». Sobre el motivo de no haber aparecido en A Madroa hasta ahora, reiteró que había «sucedido algo» pero que tenía que «resolverlo con el club».

A Pione se le había perdido la pista cuando hace hoy dos semanas acudió a A Sede para someterse a los test PCR de coronavirus. Se presentó como uno más de los 30 jugadores -24 del primer equipo y seis del filial- que había sido citados para cumplir con ese primer paso establecido en el protocolo de La Liga. A partir de ahí, cuando al lunes siguiente los otros 29 futbolistas aparecieron en A Madroa para los entrenamientos individuales, él no se personó.

 

A cambio, sí utilizó su perfil en Instagram para colgar algunos vídeos donde se ejercitaba con el balón en el jardín de su vivienda. Todo esto llegaba después de que el jugador hubiera abandonado Vigo durante el confinamiento para conducir en su vehículo hasta Dinamarca con una de sus hermanas, que hasta ese momento le había acompañado en Vigo. El jugador fue multado por esta huida sin permiso y sin avisar al club -este último aspecto, a diferencia con Smolov, el otro fugado durante la cuarentena y que ha sido uno más desde el pasado lunes-, aunque su ausencia en A Madroa no se debía aun castigo por ese motivo.

El técnico del Celta, Óscar García Junyent, comentaba a finales de la semana pasada que le gustaría contar con él como con sus compañeros, pero que «de momento», no podía ser. Ayer, solo unos días más tarde, Sisto se ponía finalmente a sus órdenes sin que se haya resuelto el misterio de qué pasó con el jugador y qué he cambiado para que por fin se haya podido incorporar a la dinámica grupal.