Siete rutas por el paraíso lucense para iniciarse en senderismo

Uxía Carrera Fernández
UXÍA CARRERA LUGO / LA VOZ

LUGO

Mirador de San Mamede en la Ruta do Ferro, en O Inicio
Mirador de San Mamede en la Ruta do Ferro, en O Inicio CARLOS RUEDA

Por montaña, paseo fluvial o núcleos rurales, la provincia ofrece con su naturaleza una actividad deportiva diferente

16 oct 2021 . Actualizado a las 18:59 h.

El deporte y el esfuerzo físico son mucho más llevaderos cuando se realizan en la naturaleza. La orografía de la provincia lucense permite disfrutar de numerosas rutas de senderismo homologadas que descubren el paisaje de Lugo, además de su patrimonio histórico. Antes de que el rural lucense se vuelva menos accesible con la entrada del invierno, el tiempo otoñal es el idóneo para iniciarse en los itinerarios que ofrece la provincia. La Xunta recoge en la aplicación móvil Sendegal la información detallada de las rutas de distinta dificultad, y siete de ellas son de intensidad baja.

RUTA DE MIRADOIRO DA TERRA CHÁ

  • Kilómetros: 10,7
  • Duración: tres horas

ALBERTO LÓPEZ

En Terra Chá hay la posibilidad de realizar la ruta Miradoiro de Outeiro de Rei, que consta de 10,7 kilómetros y de una duración estimada de tres horas. Este sendero empieza en el recinto ferial, pasa por el área recreativa Pena de Rodas y termina en la cima del monte de A Cruz de Paraños, donde se puede disfrutar de una panorámica de Terra Chá.

RUTA DAS LAGOAS

  • Kilómetros: 14
  • Duración: cuatro horas

ALBERTO LÓPEZ

En esta extensa comarca lucense se ubica también la Ruta das Lagoas, en Cospeito, con una duración de cuatro horas y una distancia de 14 kilómetros. Se inicia en la propia laguna de Cospeito pasando por la de Carballosa hasta adentrarse en A Feira do Monte, pudiendo observar el llano paisaje para terminar en la iglesia de San Martiño de Lamas.

RUTA DO AZÚMARA

  • Kilómetros: 7
  • Duración: tres horas

ALBERTO LÓPEZ

Partiendo de la visita al Museo Arqueolóxico del Castro de Viladonga, discurre la Ruta do Azúmara, en Castro de Rei, con siete kilómetros y tres horas de duración. Este sendero permite descubrir el Pazo de Fontexón o la iglesia de San Xoán de Azúmara a la vez que acompaña al río el mismo nombre hasta la antigua mina de arsénico. Finaliza en la entrada de Castro de Rei.

RUTA DAS AUGAS DE FONMIÑÁ

  • Kilómetros: 12,8
  • Duración: cuatro horas

OSCAR CELA

Por ultimo, Terra Chá ofrece la Ruta das Augas de Fonmiñá, en A Pastoriza. Transcurre por el río Miño durante 12,8 kilómetros, lo que supone una duración estimada de cuatro horas. Parte de la laguna de Fomiñá y acompaña al Miño por su orilla hasta toparse con la iglesia de O Salvador de Crecente y el castro de Saa en su parte más elevada. Pasa por la parroquia de Baltar hasta finalizar en el área recreativa da Liboira.

RUTA DO FERRO

  • Kilómetros: 6
  • Duración: dos horas

CARLOS RUEDA

Con una duración menor, de dos horas, y también un paisaje muy distinto, en O Inicio, en la comarca de Sarria, se encuentra la Ruta do Ferro. En sus seis kilómetros, este sendero comienza en la Pena do Chao, un roquedo con un petroglifo, y continúa por una pista en la ladera de los montes Pico de Santa Bárbara, A Boibela y Penedo do Campo, a más de 1.000 metros de altitud. Se pueden observar tres cuevas de minas de hierro, a las que se recomienda no acceder.

RUTA CHAO DE POUSADOIRO Y MOLINO DE GARCÍA

  • Kilómetros: 4,2
  • Duración: una hora y media

OSCAR CELA

Para disfrutar de un amplio paseo fluvial, la Ruta Chao de Pousadoiro, en Ribeira de Piquín, ofrece un itinerario de 4,2 kilómetros y una duración estimada de una hora y media. Discurre por el margen del río Eo y aunque el sendero no cruza el agua, se recomienda atravesar el puente colgante de Colado de Lamas para disfrutar de las vistas. La ruta finaliza a escasos metros del visitable Muíño de García.

ruta de la fraga da becerreira

  • Kilómetros: 6,2
  • Duración: dos horas

Por último, en Trabada se encuentra la Ruta de la Fraga da Becerreira, de dos horas de duración por 6,2 kilómetros. Esta senda de baja dificultad se introduce en la fraga junto al arroyo Vilapercide y hasta su nacimiento. Cuenta con pasarelas de madera en medio de un bosque autóctono que tiene placas identificativas. Comienza en el aparcamiento del cruce entre las carreteras nueva y vieja de Trabada a As Rodrigas.