Según Muñoz, del circuito lucense hablan maravillas los pilotos.
—Tras las reformas, ¿será un circuito más propicio para Prado?
—Jorge Prado tiene la ventaja de que cualquier circuito le es propicio. Se ha adaptado ya a todo tipo de trazados y este le encanta porque le va bien el tipo de terreno, que es duro pero con una arena esponjosa que agarra muy bien. Esto es una de las mejores cosas de este circuito. El terreno invita a montar en moto, es una gozada para los pilotos rodar en esta pista. Todos los que vinieron el año pasado al campeonato de España decían que la pista es inigualable. Además está en un paraje incomparable, en plena naturaleza.
—¿Qué acogida tuvo dentro del circuito la designación de Lugo como escala del Mundial?
—El Mundial tiene todo tipo de escenarios. Hay algunos muy clásicos, que llevan toda la vida y que son pistas que están alejadas y en lugares muy extraños, y otros con las instalaciones más cerca de las ciudades. Este ha tenido muy buena acogida, sobre todo, por su carácter simbólico, emocional, enigmático o como queramos llamarlo porque es en casa de Jorge Prado. Campeón del mundo, va a venir con el número 1 y cumple un sueño. Jorge ha ido cumpliendo todos sus sueños deportivos y los que no eran deportivos. Que su ciudad apostara por hacer un circuito con su nombre, verlo crecer, poner de acuerdo a todas las instituciones... Está entusiasmado. Que el Mundial se haga aquí, en Lugo, es un sueño cumplido en todos los sentidos para él.