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Tejerina confía en convencer a Bruselas y alejar la amenaza de veto a la sardina

Ana Balseiro
ana balseiro MADRID / LA VOZ

SOMOS MAR

Juan Carlos Hidalgo | Efe

La ministra no avanzó qué cuota defenderá: «Las cifran no van por delante del plan»

24 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La ministra de Pesca, Isabel García Tejerina, se mostró este jueves confiada en que la Comisión Europea finalmente acepte el plan conjunto que España y Portugal están elaborando para continuar con la pesquería de la sardina, aunque admitió que el recurso no está en su mejor momento y que «pesa» la amenaza de Bruselas de cerrarla.

Durante un encuentro con la prensa en el transcurso de un almuerzo organizado por la Confederación Española de Pesca (Cepesca), Tejerina aseguró que tanto Portugal como España son «conscientes» de que la sardina «no está en su momento óptimo», pero recordó que precisamente por ello ambos países trabajan conjuntamente para presentar a la UE antes del 4 de diciembre -el día 1 tendrán un encuentro con el sector- un plan para «reponer y preservar» el recurso. «Porque lo que hagamos en el 2018 va a condicionar lo que obtengamos en el 2019, 2020 y 2021. Hay que pensar en el futuro», subrayó, en referencia al interés el ministerio de garantizar la sostenibilidad del recurso y de la flota que vive de él.

Indicó que Bruselas «percibe esa buena voluntad» de ambos países para trabajar juntos y alejar la amenaza del cierre de la pesquería. Entre las medidas que españoles y lusos están dispuestos a adoptar están, por ejemplo, el establecimiento de vedas temporales para recuperar los alevines o revisar las tallas mínimas, además de moratorias, limitaciones de desembarques y refuerzo de los controles.

Y así se lo trasladaron esta misma semana al director general de Pesca de la UE, João Aguiar. Pero, según confirmaron fuentes comunitarias a La Voz, Bruselas está francamente preocupada por la situación de la pesquería -cabe recordar que los científicos recomendaron su cierre-, por lo que no permitirá seguir adelante con un plan de gestión conjunto, que este año tuvo un tope de capturas de 17.500 toneladas, si efectivamente no se garantizan las medidas adecuadas para impedir el agotamiento del recurso.

Por ello Bruselas ha pedido un plan quinquenal, detallado y convincente. En caso contrario, impondrá un total admisible de capturas (TAC) cero para el 2018, algo que Tejerina espera evitar.

De hecho, la ministra no avanzó cifra alguna de capturas con la que España se daría por satisfecha en el actual escenario para el próximo año. «Nosotros defenderemos una cifra, pero la Comisión Europea no nos dará números hasta que no le presentemos el plan, es decir, las cifras no van por delante del plan», insistió.

De 13.500 a 15.000 toneladas

Sin embargo, el ministerio manejaba días atrás unas capturas inferiores a las de este año, en concreto una horquilla de entre 13.500 y 15.000 toneladas anuales, lo que supone un 14 % menos que la actual. Al respecto, el secretario general de Cepesca, Javier Garat, señaló que «una cifra intermedia de 14.000 toneladas permitiría recuperar la biomasa de la sardina al menos en un 5 %». Añadió que ya se había recuperado un 32 % con las medidas de los últimos años.

Garat admitió que, pensando en el futuro, «se puede recuperar más teniendo un TAC, pero también aplicando otras medidas, como una veda superior a la que tenemos, con varios meses, con un tope de capturas mensual o semanal en el que los barcos se controlen y podamos gestionar mejor la cuota de la que vamos a disponer cada una de las flotas».

Como Tejerina, se mostró confiado en que Bruselas aprobará el plan «para que el próximo año podamos pescar de forma responsable, pero tranquilamente», porque -subrayó- el objetivo es compatibilizar la protección del recurso, la forma de vida de los pescadores y que los consumidores compren sardina ibérica.

La oposición gallega reclama la implicación de la Xunta en la crisis

La crisis de la sardina y la amenaza de cierre de la pesquería atracó este jueves en la comisión de Pesca del Parlamento gallego, en la que la oposición de BNG y En Marea reclamaron la implicación de la Xunta para frenar la caída de capturas. La directora xeral de Pesca, Mercedes Rodríguez, les replicó que la Administración autonómica colabora ya con la central para la elaboración del plan de recuperación de la especie.

Carmen Santos, de En Marea, reprochó que incrementar «la cuota de poco sirve si no crece el número de capturas». Montse Prado, por el BNG, afeó a la Xunta su «exercicio de irresponsabilidade» por no adoptar medidas antes para evitar la crisis actual.

«Resulta que a culpa de que non haxa sardiñas tamén vai ser nosa», se defendió Rodríguez.

La directora xeral de Pesca defendió que el Gobierno autonómico se opone de plano al cierre de la pesquería a partir del 2018, más cuando ni siquiera esa drástica medida garantizará la recuperación del stock. Subrayó también que el Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES) «non é quen de dar coa causa da situación do stock, porque conflúen elementos non o suficientemente estudados, que están dando uns niveis de recrutamento moi baixos».