
El heredero de la saga de los Agnelli es el presidente de Stellantis, el emporio automovilístico surgido de la sociedad entre PSA, Fiat y Chrysler
23 may 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Como heredero de una potencia empresarial histórica, John Elkann no subió enseguida al olimpo de los despachos. El presidente de Stellantis, el emporio automovilístico surgido de la sociedad entre PSA, Fiat y Chrysler, fue cocinero antes que fraile. Nacido en 1976 y formado en ingeniería, el heredero de la dinastía Agnelli trabajó como operario en la fábrica familiar en Inglaterra, en una línea de montaje en Polonia e incluso fue vendedor en un concesionario. Dio todos los pasos para conocer el negocio bajo la educación férrea de su abuelo. Aunque él no era la primera opción, Gianni Agnelli tuvo que formar a su nieto para que heredase el imperio Fiat, fundado en 1899, y todo el conglomerado familiar. Y es que los Agnelli son conocidos como los Kennedy italianos. Por su fortuna y su posición social, pero también por haber sumado todo tipo de tragedias.
Los hijos de Gianni Agnelli, conocido como L' Avocatto, no continuaron su camino. Edoardo, más centrado en la filosofía, la religión -se convirtió incluso al Islam- y los escándalos de drogas, se quitó la vida en el 2000 tras lanzarse desde el «Puente de los Suicidios» de Turín. La madre de John, Margherita tampoco se implicó en el negocio, aunque sí en el litigio posterior por la herencia de su padre. Había incluso otro heredero natural, su tío Giovanni, pero falleció por una enfermedad a los 33 años.
Aunque Elkann ya formaba parte del imperio, la muerte de su abuelo en el 2003 lo catapultó a lo más alto de una marca que estaba al borde de la quiebra y que, de su mano, se ha salvado de sumar otro drama. Clave en la estrategia de Elkann fue la producción de modelos de éxito, como el Panda, el Punto o el Fiat 500, pero parte de su triunfo reside en haber fusionado la marca madre y haberla acompasado a los retos del sector. De germen italiano, pero nacido en Nueva York, su educación internacional le dio apertura de miras. La fusión con PSA, origen de Stellantis, ha devuelto a su dinastía a los grandes nombres del motor. Esta alianza les ha convertido en el cuarto mayor grupo automovilístico del mundo.
De perfil discreto, a la contra de la mayoría de sus familiares, John Elkann, sigue extendiendo el imperio. El grupo se hizo en marzo con el 24 % de la firma de zapatos Christian Louboutin. Antes había invertido en la compañía china del lujo Shang Xia. Además, Elkann es el presidente de la sociedad de inversión Exor, que apuesta por las compañías emergentes. La familia, situada entre las diez más ricas del mundo, tiene participaciones en medios como The Economist, además de dominar el grupo editorial que controla La Stampa y La Repubblica.
Su matrimonio con Lavinia Borromeo, le emparentó con otra ilustre casa italiana, aunque en su haber siempre estará haber salvado a su propia familia y haber multiplicado por diez su negocio. Un entramado que conserva dos de sus símbolos más populares: la propiedad de la Juventus de Turín desde 1923 y mantener el dominio de Ferrari. Elkkan es más que nunca el «Cavallino Rampante».