Una encuesta revela que el 66 % de los trabajadores negros, asiáticos y de otras etnias han admitido haber sufrido algún tipo de discriminación en el puesto de trabajo
28 nov 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Hacerse con un puesto en alguno de los bancos y grandes firmas financieras que operan en la City de Londres no es tarea fácil. Solo aquellos con las mejores credenciales académicas y laborales llegan allí. Oficialmente, el color de piel, el origen y la condición social no importa; y puede que eso sea así en el proceso de selección, pero una vez dentro, las posibilidades de ser objeto de algún tipo de discriminación son altas. Así lo revela un estudio elaborado por un grupo de investigadores, el cual concluye que el 66 % de los trabajadores financieros negros, asiáticos y de otras minorías étnicas aseguraron haber sido víctimas de algún tipo de ataque racista en su trabajo.
Para elaborar su informe, el grupo Race to Equality (Carrera hacia la Igualdad) entrevistó a 800 empleados de 440 empresas, que en conjunto facturan más 1,4 billones de libras anuales (1.668 millones de euros); la investigación se encontró con que dos de cada tres de los encuestados afirmaron haberse sentido discriminados en el algún momento en la empresa para la que trabajaban. Por su parte, algo más de una cuarta parte (28 %) aseguró que la discriminación de la que eran objeto estaba frenando su carrera, mientras que casi la mitad (48 %) sostuvo su desarrollo profesional estaba siendo más lento que el de sus colegas blancos. A esto se suma que cuatro de cada 10 (41 %) afirman que sus empleadores no estaban demostrando un verdadero compromiso con la creación de un entorno laboral inclusivo, mientras que solo la mitad reconoció que sus superiores creían realmente que la diversidad podía jugar un papel fundamental. El informe de Race to Equality se suma a otro publicado el verano pasado por la Autoridad para la Conducta Financiera (FCA, por sus siglas en inglés), el cual halló que menos de uno de cada 10 puestos gerenciales en bancos y empresas de servicios financieros están hoy ocupados por personal de raza negra, asiática o de otras minorías étnicas.
Para intentar revertir esta situación, la FCA y el Banco de Inglaterra están evaluando la posibilidad de vincular los aumentos salariales de los máximos directivos de los bancos y de las empresas financieras a que ellos cumplan determinados objetivos en materia de igualdad. «La falta de diversidad en la gerencia puede conducir a una falta de opiniones y de nuevas formas de trabajo, lo que puede comprometer la seguridad y solidez de las empresas», advirtió recientemente a los medios londinenses el vicegobernador del Banco de Inglaterra, Sam Woods.
Si no ser blanco puede constituir un obstáculo para progresar en la City, tener un color de piel más oscuro y ser mujer es incluso peor. Una investigación de la London School of Economics concluyó que, si bien todas las mujeres experimentan diferencias sustanciales en sus salarios, horas y representación en los puestos directivos, son las trabajadoras de raza negra, independientemente de si nacieron en el Reino Unido o no, las que tienen las probabilidades más bajas de ser las que más ganan. Mientras que el 1,3% de los hombres blancos británicos se encuentra en el 1% que más ganan, solo el 0,2 % de las mujeres blancas británicas están en la cúspide salarial, y menos del 0,1% de las mujeres directivas negras logran alcanzarla. Estos datos los obtuvieron los investigadores tras revisar las tablas salariales de decenas de empresas a lo largo de los últimos 17 años. Una muestra muy representativa en tamaño y tiempo.