Fallece José Manuel Carballo, el vecino de Lugo que luchó por mejorar la calidad de vida de los lucenses

OBITUARIOS

Fue la cara y la voz, desde el Sagrado Corazón, de numerosas reclamaciones vecinales, como la demanda de servicios sanitarios en el HULA o de más y mejores frecuencias ferroviarias
04 mar 2025 . Actualizado a las 19:14 h.Detrás de las grandes reclamaciones y la denuncia de problemas sin resolver que ha tenido y aún tiene Lugo ciudad ha habido varias personas en las últimas tres décadas, pero quizás la figura de José Manuel Carballo Vázquez emerge por su dedicación y tesón en la lucha por el bien común de los lucenses. Una enfermedad, que le había apartado desde hace casi tres años de la primera línea vecinal y mediática, acabó este 3 de marzo con su vida, dejando un sentido pesar entre sus vecinos del Sagrado Corazón y los miembros de la Federación Vecinal de Lugo.
Natural de Saavedra, en Begonte, José Manuel Carballo trabajó en la nave que Comercial Cereijo tuvo en A Milagrosa, aunque él siempre vivió en el Sagrado Corazón, el barrio por el que luchó con el fin de conseguir mejoras en infraestructuras y servicios. Ya a inicios de los años noventa, dirigía una plataforma vecinal para evitar el cierre del centro de salud y pronto se convirtió en el presidente de la Asociación Porta de Lugo.
Este colectivo luchó por conseguir que se hiciese el parque del Sagrado Corazón, algo que fue una realidad cuando se inauguró en el 2002 en los terrenos de la antigua Campsa. Ese parque que dentro de un año estará conectado con la ciudad a través del paso subterráneo de la intermodal.
Su entrada en la federación vecinal
A finales de los noventa, el movimiento vecinal en la ciudad iba creciendo y se constituye la federación que uniría las diferentes tendencias y colectivos que trabajaban de manera dispersa. Y en ese arranque estuvo José Manuel Carballo, junto a Jesús Vázquez, que era vicepresidente, y Beatriz Varela, que fue la primera presidenta.
Y desde la federación, Carballo estuvo detrás de las grandes reclamaciones y batallas por mejorar la vida de los lucenses, como fue la plataforma para conseguir los servicios de Hemodinámica, Radioterapia y Medicina Nuclear, la plataforma para reclamar mejores servicios ferroviarios, la reclamación de una unidad de ictus, el movimiento contra la okupación (su barrio estaba en la diana), el desarrollo del Plan Paradai, o el aparcamiento gratuito en el HULA. En muchas de estas plataformas fue su portavoz debido a su capacidad para buscar información y transmitir con dureza, pero con datos, las reclamaciones que tenía la federación vecinal.

Carballo, persona muy afable y que siempre hablaba de cara, fue el gran motor de la federación vecinal gracias a su ímpetu, a que era capaz de llamar a las puertas de cualquier Administración para exigir con papeles y argumentos, además de una persona que ofreció confianza a su presidente vecinal: «Máis alá de que era unha persoa que cumpría e traballaba con seriedade, para min váisenos unha das persoas máis importantes da recente historia de Lugo e a persoa que máis creeu de verdade no movemento veciñal», recordaba esta mañana Jesús Vázquez tras conocer el fallecimiento de su amigo.
José Manuel Carballo tenía especial interés por los temas sanitarios. Quizás que su mujer, Clarisa López, fue enfermera, y fuese primo de José Luis Díaz, un socialista siempre defensor de la sanidad pública, hiciese que Carballo mirase con más interés las peticiones sanitarias, siendo una auténtico batallador contra las decisiones del Sergas o contra los olvidos de la consellería hacia Lugo.
La enfermedad no solo le minó las fuerzas si no también la ilusión, aunque siempre que tenía momentos de mejoría, volvía a la carga con las clásicas reivindicaciones que tiene la ciudad. En las últimas elecciones municipales, en una visita de la entonces alcaldesa, Lara Méndez, a su barrio, el no pudo acompañarla para recordarle las peticiones históricas para su barrio, pero desde el cuarto piso de su casa, en la avenida Alfonso Suárez, iba viendo la visita y por teléfono le explicaba a la regidora socialista las peticiones. Así era Carballo.
Su funeral y su recuerdo
José Manuel Carballo, que tenía una hija, Ana Isabel, será incinerado en la intimidad familiar. La capilla ardiente está en Velatorios Lucenses, en As Gándaras, y esta tarde de martes 4 de marzo, a las seis, se celebrará una misa funeral en Saavedra, Begonte.
En su esquela se resume la vida y la entrega hacia los demás que siempre tuvo José Manuel Carballo: «Siempre generoso, siempre presente, luchador incansable, defensor de sus ideales y ejemplo de esfuerzo. Nos deja su fortaleza como herencia y su recuerdo como refugio. Su recuerdo seguirá vivo en cada anécdota, en cada sonrisa compartida, en cada instante de amor que nos regaló».