El conflicto de la basura
Si tal como declara la alcaldesa de A Coruña y varios miembros de la corporación el sindicato de los empleados de la recogida de residuos está chantajeando al Concello, y por tanto a una ciudad de 250.000 habitantes, no se entiende que no tomen medidas contra una actitud que es claramente ilegal. J. A. López. A Coruña.
Comercio de barrio
Estoy en contra de la libertad de horarios comerciales, ya que estos deben ser equilibrados. Va en detrimento de lo que significan los barrios vivos y dinámicos, que deben ir de la mano de la actividad comercial. Tiene que producirse un consenso político para fomentar el pequeño comercio, beneficiando a comerciantes y consumidores. Sin él, se ve amenazada su supervivencia. J. A. Ávila. Barcelona.
Todos somos turistas
Ir en contra del turismo y de los turistas —todos lo somos de alguna forma— no tiene sentido. Hay que exigir su control a las instituciones públicas, que no han sabido o no han querido regularizar debidamente el tema, como sucede con la inmigración ilegal mal entendida y que nos desborda. Contra quien también debe actuarse es contra los gremios hosteleros, hoteles, bares y restaurantes, que aprovechando la bonanza disparan sus precios en perjuicio de los residentes habituales de las localidades a las que acude ese turismo, encareciendo la vida. Con los pisos turísticos, igualmente es vergonzosa la dejadez administrativa por quienes deben velar por su regularización. Ángel Santamaría Castro. Bilbao