Estrellas, fotos y vacunas

PONTEVEDRA

HOEMPO

La hostelería celebra las distinciones Michelin y la llegada a Madrid de los once caminantes. Casi todos los políticos se pelean por fotografiarse con ellos

20 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Semanas de contrastes. La que hoy concluye, arrancó con el subidón que supuso la obtención de 15 estrellas Michelin por restaurantes gallegos. Un nuevo reconocimiento a la calidad de nuestra restauración. Una cocina de altísima calidad, liderada por la provincia de Pontevedra que reúne ocho de esas distinciones, con el chef Javi Olleros y su establecimiento Culler de Pau como abanderados, al ser el primer restaurante en la historia de la comunidad en lucir dos estrellas de la prestigiosa guía.

Mención especial para Iñaki Bretal que eleva, muy merecidamente, al restaurante Eirado da Leña, el único de la capital, a esa lista top en la que siguen estando valores seguros como Pepe Solla y Pepe Vieira, ambos establecidos en el concello de Poio, y Yayo Daporta, de Cambados.

Sin embargo, la semana concluye con la preocupación que deviene al intuir un nuevo endurecimiento de las restricciones en Galicia. Como consecuencia del incremento de contagios que viene asomando en los últimos días. Precisamente será mañana, lunes, cuando volverá a reunirse el comité clínico que asesora a la Xunta y sabremos cómo viene la receta de los nuevos recortes que presumimos. Y que la hostelería teme que les volverá a penalizar a cambio del populismo fácil de no prohibir.

Escribí «semanas de contrastes» porque si mañana existe ese temor razonable a nuevas restricciones, sin embargo, la semana nos propone dos motivos para reconciliarnos con la esperanza en próximas horas: por un lado, llegarán a Madrid los once valientes que hace catorce días se echaron a andar para demandar un rescate para la hostelería; y, por otro, y el día 27 comenzará en Galicia como en el resto de España, la vacunación contra el coronavirus.

Empujones por salir en la foto

Miembros de la dirección de la asociación de hosteleros pontevedreses Hoempo daban a conocer ayer qué grupos políticos del Parlamento español quieren recibir y entrevistarse con los once hosteleros de la comarca de Pontevedra. Va a haber empujones por hacerse la foto al lado de Juanjo Gondar, Rafa Rúa, Lorena Rodríguez, Dani Lorenzo y demás. Los políticos olfatean estas oportunidades.

Después de haberse metido entre pecho y espalda seiscientos y pico kilómetros de caminatas, con un tiempo de perros, para demandar medidas de apoyo a un sector sistémico de la economía pontevedresa, gallega y española, estos once hosteleros son un bocado excepcional a los ojos de los políticos y asesores para procurarse un titular de ámbito nacional junto «a esos gallegos».

Según Hoempo, les van a recibir casi todos los partidos políticos. Van a ser casi como un paso procesional parando por estaciones: la primera Isabel Díaz Ayuso, en Puerta del Sol, sede de la Comunidad de Madrid. Y después en el Congreso de los Diputados, estarán con representantes de PSOE (Rafael Simancas y Tino Fernández), PP (con Ana Pastor y Rafa Domínguez). Y también, Unidas Podemos, Ciudadanos, Convergencia y Vox, según informó Hoempo. 

No he visto en la relación al BNG. Me pregunto si el diputado Néstor Rego se ha contagiado de la manifiesta falta de empatía de Miguel Fernández Lores o si el ascendente del alcalde pontevedrés en ese partido político llega a tal extremo de influencia.

Solidaridad gremial

Afortunadamente aquello que impiden las filias y fobias de los políticos, lo puede la solidaridad de un gremio que nunca pensé que pudiera unirse tanto. Qué precisamente cocineros laureados como Javi Olleros o Pepe Solla se hayan adherido a la causa reivindicativa de la hostelería pontevedresa acudiendo a las recientes movilizaciones que se han desarrollado en la ciudad, evidencian una conciencia gremial que resulta tan emocionante como inesperada en un sector tradicionalmente disgregado.

Mañana estarán en Madrid, a su lado, unos quinientos hosteleros de Pontevedra que se las han ingeniado para viajar hasta allí por muy diferentes medios. Tanto ellos como los cerca de dos mil autónomos y empresarios del sector llegados de otros puntos de toda España, deberán reunirse observando las distancias necesarias para componer una de las imágenes del año. Un respaldo espectacular cuando culmina una marcha por un rescate del sector en Pontevedra y para toda España.

Una coladera

El presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig ha puesto el listón más alto en cuanto al endurecimiento de las restricciones en estas fiestas. No me parece que su homólogo Alberto Núñez Feijoo esté por imitarlas para Galicia. El último mensaje del presidente de la Xunta es que «esté como esté la evolución de los contagios» garantiza que el miércoles 23 las familias podrán moverse por la comunidad autónoma para ir a pasar Nochebuena y Navidad con sus seres queridos. Es decir, viajes free con el pretexto de «razones familiares». Una coladera.

Estamos ante una evidente inacción, tan populista como irresponsable, qué terminará agobiando al sistema sanitario gallego después Reyes. Para los especialistas, son las reuniones familiares, sociales y de amigos, el gran vehículo de los contagios.

Cito al gerente del Chop, José Ramón Gómez. El viernes dijo que «la tasa de incidencia no nos indica que vayamos a tener una Navidad y un Fin de Año cómodos. La restricción de movilidad y de interacción social debe mantenerse».