Como consecuencia de la evolución de la pandemia, la Comisión de Emerxencias do covid-19 de Poio acordó «o control de temperatura a usuarios de diferentes equipamentos municipais». De este modo, en principio y según expuso la edil de Seguridade Cidadá, Marga Caldas, las mediciones se llevaran a cabo en el Consistorio, el gimnasio, la Casa Rosada y las dependencias de la Policía Local con la intención de evitar posibles contagios «e velar pola seguridade tanto da veciñanza como do persoal municipal».
En este marco, la concejala hizo un llamamiento para apelar a la responsabilidad ciudadana «á hora de apostar polas fórmulas telemáticas ou as citas previas, no caso de que non resulte imprescindible ter que realizar xestións de xeito presencial nestas dependencias».
Por su parte, tras el encuentro telemático mantenido este jueves con el conselleiro de Sanidade, el alcalde Luciano Sobral reconoció que «vemos con preocupación que a situación non mellora», al tiempo que insistió en el hecho de que el Concello «continuará velando polo cumprimento destas restricións». En este sentido, aludió a que el la Administración local mantiene operativos otros servicios impulsados en los últimos meses, caso de «a limpeza e desinfección de centros de saúde e espazos públicos, a entrega de medicinas e alimentos, así como retirada do lixo, a persoas enfermas que se atopen en cuarentena e os controis, por parte da Policía Local».