El primer fin de semana de calor y turismo anticipa un verano récord

Lars Christian Casares Berg
ch. casares PONTEVEDRA / LA VOZ

SANXENXO

Emilio Moldes

Con la segunda quincena de junio empieza la temporada en las Rías Baixas

19 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Los primeros socorristas ya están sobre las playas, los operadores turísticos hablan por primera vez en años de plantearse una subida de tarifas mínimas y los alquileres vacacionales repuntan en precio y se afianzan como opción. Todo ello después de un mes de mayo histórico en cuanto a ocupación en las Rías Baixas, con unos índices de reservas que se situaron en el 60 %, frente al 35 % registrado en el mismo mes del año 2016. Temperaturas medias suaves, escasez de lluvias y una conjunción de festivos como el primero de mayo, que propició un fin de semana largo para los madrileños, una de las principales comunidades emisora de turistas hacia Galicia, hizo de mayo un buen mes. A ello se sumó San Isidro y el propio festivo autonómico de las Letras Galegas, que espoleó al turista interior, el que se mueve en Galicia de un destino a otro.

Ahora, con un inicio de temporada, oficialmente ya con la segunda quincena de junio inaugurada a golpe además de unas temperaturas ciertamente veraniegas, los empresarios turísticos calculan ya que se repetirá la avalancha de visitantes a las Rías Baixas del 2016 e incluso se incrementará. De ahí que se pueda hablar ya en el sector de un tímido incremento de los precios de en torno al 3 %.

Se trata así de remontar después de que los establecimientos hiciesen una apuesta por la bajada de precios durante los años más duros de la crisis, sin que estos se readaptasen al alza luego.

Las previsiones de Turismo Rías Baixas también indican un alza de visitantes de la mano no solo de los atractivos tradicionales, como la gastronomía o la naturaleza, sino también por medio de planes como los Festivales Musicales de las Rías Baixas, que, solo el año pasado, lograron mover unas cifras de unas doscientas mil personas.

Las Rías Baixas parecen estar de moda y últimamente también tocadas por una bendición climática. El tirón del Camino de Santiago hace además ya difícil encontrar habitaciones de hotel en la ruta jacobea, que este año cuenta con un incremento de peregrinos a golpe de algunos grupos como el que se espera para julio que superará los mil romeros de una tacada.

Con todo, y ante la buena perspectiva, hay algunas preocupaciones en el sector. Como la expresada por el Consorcio de Empresarios Turísticos de Sanxenxo la pasada Semana Santa acerca del descontrol de la marcha nocturna en un enclave que es bandera del turismo en todas las Rías Baixas. El Consorcio de Empresarios Turísticos solicitó entonces que se tomasen medidas para frenar el «descontrol nocturno» que, en su opinión, daña la imagen del municipio y pone en peligro su principal activo económico: los visitantes. El gobierno local parece haber tomado nota y ha reforzado el control con más agentes en la calle y poniendo esta problemática en primer foco.

Sanxenxo sigue siendo el destino estrella de las Rías Baixas y en los hoteles de mayor categoría resulta ya difícil reservar para julio. Un lleno que se extenderá al resto de las Rías Baixas si se mantiene la previsión de un verano seco y caluroso, lo que animará, dicen, las reservas de última hora.

El tirón del Camino hace difícil encontrar habitación de hotel en la ruta del sur